A un costado de las vías del tren se instaló una carpa blanca, con sillas al interior y al exterior un letrero en la parte superior en donde se puede leer “Punto de Rescate Humanitario”, según dicen los vecinos de la colonia Santa Rosa de Gómez Palacio apareció hace un día y está a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM) con la finalidad de vigilar y evitar que los migrantes aborden el tren que va para el norte de la República Mexicana.
La estructura se ubica por la calle Narciso Mendoza e Ignacio Zaragoza, en donde también se observa una presencia intermitente de elementos de la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Aumenta flujo de migrantes
Debido al cierre de los patios de maniobras de Ferromex en el vecino municipio de Torreón, en Gómez Palacio se incrementó la presencia de migrantes que iban recorriendo el país con destino final, Estados Unidos. Esto ocasionó la intensificación de las medidas de vigilancia como parte del operativo de rescate de migrantes en esta ciudad, implementado desde finales de marzo.
Debido a las acciones del INM, decenas de personas del centro y sur de América, que van en busca del sueño americano, están varados en la colonia Santa Rosa, en donde ya cada uno de los vecinos, se puede decir que tiene una casa del migrante.
Varados en Santa Rosa
En uno de estos grupos, se encuentra Manuel Angulo, procedente de Venezuela, quien desde hace alrededor de 28 días emprendió un viaje, “fuerte” como lo describe, debido a las medidas de presión implementadas por Migración, y que inclusive los han hecho correr.
“Ahorita como puede ver estamos todos aquí, porque no nos quieren dejar subir al tren y migración pues no nos deja llegar a los rieles, entonces ya tenemos aquí varios días”.
Manuel de 22 años de edad, desde hace tres días no a podido salir de Santa Rosa, y esa misma información comparte con su familia en Venezuela, con quien aún puede estar en contacto, lo cual le ha ayudado a no desesperarse y tener fe de que podrá abordar el tren, pues como le dicen sus seres queridos, “atrás, ni para agarrar impulso”.
En el grupo con el que llegó, son 14 personas quienes han encontrado entre los gomezpalatinos a personas buenas que les han ayudado con agua, alimento, e inclusive permitirles el baño y asearse.
En Estados Unidos, lo espera un tío, y lo único que pide a las autoridades migratorias, es que les den la oportunidad de subirse al tren, pues no pretenden quedarse en México, como todas las personas que están en esta misma situación.
EGO