Una familia procedente de Venezuela denunció haber sido víctima de secuestro por organizaciones criminales que operan en el país, luego de que el Instituto Nacional de Migración (INM) los detuvo y después los abandonó a su suerte en el estado de Veracruz.
Refieren haber abandonado su país ubicado en la costa norte de América del Sur con la intención de mejorar su calidad de vida y llegar a Estados Unidos; sin embargo, en su trayecto fueron interceptados por autoridades migratorias, quienes lejos de brindarles ayuda, los abandonaron en una comunidad veracruzana.
Junto a los migrantes viajaba una menor de un año con cuatro meses de edad, los cuales cayeron en manos de delincuentes, quienes pidieron rescate a familiares para poder liberarlos, aunque en todo momento advierten que tuvieron temor de perder la vida.
“Conmigo viene mi esposa, mi suegra y mi hija, fuimos secuestrados en el estado de Veracruz, nos soltaron quince días después de la aprehensión, pagamos un rescate, al principio había pedido diez mil dólares y después nos bajaron hasta seis mil dólares; ahí nos daban de comer arroz y sopa, amedrentaban mucho con pegarnos, con hacerle daño a mi hija porque ellos mandan video para que paguen el rescate, se enfrascaron mucho con la niña para conmover el corazón, pero yo me oponía y a mí sí me golpearon, hasta que uno de nuestros familiares se hizo cargo y pagaron el rescate”, relató Jonathan Enrique García Figuera.
Actualmente se encuentran refugiados en el municipio de Tampico, donde han encontrado el apoyo de activistas, quienes los han orientado para acudir a la Fiscalía General de Justicia.