En demanda de justicia por el homicidio de las 67 víctimas del incendio ocurrido en las instalaciones migratorias del gobierno federal, un grupo de personas migrantes se manifestó ayer en el marco de la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador, a Ciudad Juárez, Chihuahua.
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El mandatario no se detuvo para hablar con ellos. Salió del edificio, donde sostuvo una reunión privada con funcionarios de los programas sociales, a bordo de una camioneta color blanco, con el vidrio del lado del copiloto abajo y alcanzó a recibir algunos sobres y cartas.
“Señor Presidente, por favor, queremos hablar con usted. Aquí está el pueblo de Latinoamérica y del mundo, queremos plantearle la situación del asesinato de los 39 migrantes (sic) que murieron quemados ahí en el centro de Migración”, dijo uno de los migrantes sin lograr que AMLO se detuviera.
“No haga lo que lo de los Estados Unidos”, le alcanzó a decir una de las manifestantes e integrante de una organización civil. A lo que AMLO respondió “no somos iguales mi amor, no nos confunda”.
En otro momento, el Presidente le dijo a la manifestante “te manda Maru, mi amor” en alusión a la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván y la mujer reviró “no para nada, ella no me representa”.
Metros adelante un grupo de simpatizantes de AMLO gritaron en varias ocasiones “es un honor estar con Obrador” y “no estás solo”. Al mismo tiempo los manifestantes seguían pidiendo justicia a gritos mientras el Presidente se retiraba del lugar.
AMLO llegó al gimnasio del Colegio de Bachilleres, ubicado al oriente de Juárez, alrededor de las 12:25 del día. Unos 10 minutos más tarde llegaron los manifestantes, ellos se trasladaron desde el exterior del edificio del Instituto Nacional de Migración (INM) que se incendió el lunes pasado y donde mantienen una vigilia permanente.
Mientras López Obrador sostenía la reunión privada dentro del gimnasio, los migrantes pedían a gritos de justicia, un trato humanitario y respeto a sus derechos humanos. Además, algunos cantaron el himno nacional de Venezuela.
"¡Justicia!", "¡Qué salga!, ¡Qué salga!", "¡Muerte no, si a la vida!", "¡Hoy fueron ellos, mañana podrán ser otros!", "Somos inmigrantes, todos somos hermanos, merecemos respeto, somos seres humanos, no a la xenofobia", Pedimos que nos traten con amor porque no somos delincuentes. En el nombre de todo el pueblo migrante del mundo entero que se consiga acá, en territorio mexicano, pedimos justicia", expresó Juan Pavón de Venezuela y quien fue coreado por las otras personas.
“Queremos proponerle al presidente ¿qué podemos hacer? para nosotros estar tranquilos aquí en su país y así poder darle, mientras nos sale la cita, una mejora a nuestra familia. ¿Qué propuesta él tiene? Y ¿cómo podemos coordinar nosotros como migrantes de que nos apoye?”, dijo a su vez, Richard Franco de Venezuela.
Ana de Dios Pavón de 13 años narró los atropellos que ha sufrido durante su trayecto por México y entonó el himno nacional de Venezuela con la ayuda del resto de los migrantes pues al inicio las lágrimas no le permitieron que su voz se escuchara.
“Yo soy una niña migrante, y yo quiero que nos escuchen, ya basta de tanto violar nuestros derechos porque somos seres humanos. Tenemos derecho al libre tránsito, no venimos a quedarnos aquí, venimos por un sueño, por metas, yo quiero estudiar, mi familia quiere salir adelante como muchos de los que estamos aquí. No somos animales ni tampoco somos pollos, para que dejen quemar a esos migrantes como si fueran pollos”, expresó Ana quien tiene dos años sin poder asistir a la escuela.
ledz