La sequía que se ha prolongado por tres años consecutivos pega a la ganadería del norte de Durango, lo que propició la muerte de miles de reses y mermó la actividad, a lo que se suma la baja paridad del peso dólar, que impacta en su venta de becerros en pie de exportación.
Así lo declaró José Miguel Campillo Carrete, presidente de la Unión Norte de Engordadores de Ganado, quien refirió que otro factor que les perjudica en sus ganancias es la inflación, ya que los costos de los insumos en algunos casos se incrementaron hasta en un 100 por ciento.
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“Mientras que el gobierno presume al 'super peso', el tipo de cambio barato no nos ayuda a nosotros que somos exportadores, ya que la paridad peso-dólar a la baja nos afecta, pues nosotros vendemos en dólares nuestros becerros de engorda a los Estados Unidos, por lo que entre el bajo precio y el alza de los insumos,el margen de utilidad que nos queda es bajo”, dijo.
Alza de insumos y falta de apoyos federales
Como ejemplo, citó que en el caso de los granos, el precio del maíz se incrementó hasta en un 100 por ciento en los últimos dos años, ya que de 4 mil pesos la tonelada, se elevó a 7 mil 500 pesos, a lo que se agrega el alto costo de la energía eléctrica y otros insumos, como los medicamentos.
Dijo que ya llevan una racha de tres años con malos tiempos, en donde la falta de apoyos por parte del gobierno federal también se resiente, al eliminarse una serie de subsidios que eran destinados a la ganadería, como el ProGan.
Campillo Carrete expuso que con los últimos años de sequía en el norte de Durango, se habla de un impacto en la mortandad del ganado donde se tiene estimado el fallecimiento de al menos unas mil cabezas.
“Esas son las que fallecen, pero no se habla del esfuerzo que siguen haciendo ganaderos para salvar a sus hatos, lo que implica que ante la falta de pastos en los agostaderos, se les tiene que llevar suplemento alimenticio, agua y sales, así como atención médica para aquellas que registran algunas enfermedades propias de la desnutrición del ganado”, comentó el presidente de la UENG.
Refirió que en cuanto al precio del ganado, en este momento el becerro de exportación se vende en 60 pesos el kilogramo, lo que se considera bajo, por lo que el margen de ganancia es todavía más reducido.
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