A cuatro años de la administración del gobernador Alejandro Murat, a Oaxaca ha regresado la estabilidad política, ha mejorado la educación y la relación con el magisterio, mientras la prevención e inversión en salud ha permitido afrontar de mejor manera este año, uno de los más difíciles debido al covid-19.
En entrevista, en el marco de su cuarto informe de gobierno, el mandatario estatal señaló que ante la emergencia sanitaria hubo logros que permitieron la gobernanza en Oaxaca, como fue tener tres años seguidos el mayor número de clases y la solución de 45 conflictos agrarios.
Murat reconoció que aún faltan muchas cosas por hacer, sobre todo en materia de seguridad. No obstante, destacó que a pesar de la epidemia, Oaxaca está creciendo 3 por ciento y cuenta con un plan de reactivación económica.
Ante “la pandemia, el gobierno hizo un planteamiento al inicio de la administración para fortalecer el sector salud; en ese sentido, Oaxaca, que está en semáforo amarillo, nunca ha estado por debajo de 50 por ciento de camas disponibles y estamos 2 por ciento abajo del índice de letalidad nacional.
“En mi administración desde el primer día instalamos el Consejo de Salubridad Estatal y es el que me ha ido orientando para tomar las decisiones importantes del gobierno; fuimos el primer estado que canceló un evento público.
“La segunda parte tiene que ver con la atención médica, ahí la primera acción fue asegurarnos que hubiera el equipo de protección para doctores y doctoras. Se terminaron tres hospitales de especialidad arrancando este año que suman casi 300 camas e incorporamos un hospital de terapia móvil para la gente que requiere oxígeno”.
En materia económica, el gobernador resaltó la inyección de mil 200 millones de pesos durante el semáforo rojo acompañada de la condonación al impuesto sobre la nómina de los trabajadores.
“Reactivamos la construcción de dos carreteras que estaban abandonadas, coordinamos con el Gobierno Federal para terminar el proyecto interoceánico, acompañado de la puesta en marcha de más de 100 obras de gran calado como un centro cultural para Oaxaca, un centro de congresos en Huatulco, el metrobús, más de 800 km de tuberías y estamos a uno por ciento de tener la cobertura total de luz en el estado”.
Tras la pandemia ¿qué plan tiene para la educación?
“En Oaxaca hemos creado condiciones de gobernabilidad que no había antes y, lo más importante, es que pudimos entablar una relación de respeto con el magisterio que nos permitió tener los tres años con mayor número de clases.
Además, “hemos resuelto más de 42 conflictos agrarios; cuando llegamos había más de 80 y el gobierno anterior solo pudo resolver seis. Somos uno de los 10 estados más seguros del país. En términos de gobernabilidad y seguridad, Oaxaca está dando resultados”.
¿Cuál es su posición ante la Alianza Federalista?
Respeto a todos mis compañeros y compañeras gobernadores, pero yo entiendo la política como un instrumento para construir no para destruir, como un instrumento para generar acuerdos no para denostar. Me parece que, especialmente cuando hay una pandemia, la emergencia es la que debe de ocuparnos, eso significa salvar vidas y que haya más dinero en el bolsillo familiar. Es en eso en lo que debemos estar ocupados.