La diputada del PAN, Guadalupe Leal Rodríguez, propuso penas de hasta cuatro años de prisión y multas de 200 a 500 Unidades de Medida y Actualización (UMA), que van de los 19 mil 244 a 48 mil 110 pesos, contra las personas que organicen, promuevan, difundan o realicen uno o varios espectáculos públicos o privados de tauromaquia, peleas de gallos, pelea de perros, con o sin apuestas o las permita en su propiedad.
La legisladora presentará la iniciativa en el Congreso local para reformar al menos ocho artículos, entre ellos el 473 del Código Penal de Puebla, con el fin de que se incluya en la lista de sancionados aquellos espectáculos de tauromaquia y peleas de gallos. De esta manera, se busca castigar a quienes incurran estas malas prácticas, como azuzar a los animales para que se ataquen entre ellos o a las personas, así como a quienes hagan peleas con el objeto de realizar un espectáculo público o privado.
Otras de las reformas aplican a la Ley de Bienestar Animal, como en el artículo 94, donde especifica que las denuncias populares puedan hacerse tanto por escrito, como vía telefónica, medios electrónicos oficiales, por comparecencia o cualquier otro análogo que el Instituto de Bienestar Animal determine para que se abra la investigación de oficio.
La iniciativa de la albiazul propone reformar el Código Penal en el artículo 470, para que los castigos impuestos de seis meses a cuatro años de prisión y una multa de 50 a 300 UMAS (de 4 mil 811 hasta 28 mil 866 pesos) tengan alcance cuando se realicen actos de maltrato o crueldad en contra de cualquier animal con la intención de ocasionarle dolor, sufrimiento o afectar su bienestar, sin causa justificada, provocándole lesiones que no pongan en peligro la vida.
En caso de que actos de maltrato o crueldad provoquen la muerte del animal, las penas a imponer son cuatro a ocho años de prisión y multa de 200 a 500 UMAS, que sería de 19 mil 244 pesos a 48 mil 110 pesos, acciones que de igual forma tengan alcance “cuando dichas conductas sean con el propósito de brindar un espectáculo público o privado”.
AFM