Al cumplir 491 años de su fundación, Puebla es una de las diez ciudades mexicanas consideradas patrimonio de la humanidad, requiere una revisión y actualización del Protocolo de Actuación para la Zona de Monumentos del Centro Histórico.
El rector de la Universidad Iberoamericana Puebla, Mario Patrón Sánchez, destacó que desde 1977, el Centro Histórico de la Angelópolis es la segunda poligonal más extensa del país y una de las más amplias de América Latina.
“Puebla cuenta con el segundo poligonal más extensa del país, elemento insustituible para la identidad poblana, pero, la convierte, en una zona susceptible a diversas problemáticas”, destacó.
Señaló que uno de los aprendizajes de la pandemia de covid-19 es que las sociedades no están preparadas para enfrentar lo inesperado, ante lo cual, es momento de crear un plan para enfrentar los riesgos.
“Nuestra apuesta con nuestra especialidad en Gestión Integral de Riesgo tiene vida y vigencia en la alianza con las instituciones públicas. Son ellas quienes tienen que asegurar la existencia de políticas que nos permita gestionar los riesgos”, apuntó.
Resaltó que la Universidad Iberoamericana Puebla estableció dos convenios de colaboración con la Gerencia del Centro Histórico y Patrimonio Cultural (GCHPC) relacionados con la gestión oportuna de riesgos.
“Es el vínculo como una oportunidad privilegiada para salvaguardar la historia de Puebla y de la Compañía de Jesús en la ciudad. La intención es construir un protocolo de contingencia para que todos los actores involucrados sepan qué hacer en caso de siniestros.
De acuerdo con información de la Ibero Puebla, el protocolo de actuación ante riesgos en la zona de monumentos de la Angelópolis contempla en una primera etapa la colaboración del claustro de la Especialidad en Gestión Integral del Riesgo de la Universidad Jesuita en la revisión del Protocolo de Actuación para la Zona de Monumentos de la Ciudad de Puebla.
Los investigadores de la institución que forman parte del Sistema Universitario Jesuita realizarán un diagnóstico sobre el estado de la zona de Monumentos a nivel jurídico, social y de conservación y generarán una propuesta de acción.
En su oportunidad, Lilia Vélez Iglesias, directora general Académica de la Universidad Iberoamericana Puebla destacó que, de forma conjunta, se busca que la comunidad de la institución poblana colabore en la construcción de soluciones desde lo comunitario.
“No podemos hacer un diseño de una política de intervención sin la participación de todas y todos los que lo viven, el Centro Histórico”, detalló.
Para Xavier Recio Oviedo, director del Departamento de Arte, Diseño y Arquitectura de la institución jesuita, señaló que incidir en el Centro Histórico implica fortalecer identidades y contribuir a resignificarlas.
Señaló que en una primera instancia, la Ibero Puebla colaborará en la revisión y actualización del Protocolo de Actuación para la Zona de Monumentos de la Ciudad de Puebla; sin embargo, en siguientes etapas, se podrá trabajar en otros proyectos de interés.
CHM