El operativo de inspección y vigilancia en contra de la pesca furtiva de camarón en Sinaloa comenzó desde el muelle de la Puntilla, en Mazatlán, Sinaloa.
Las embarcaciones Kukulcan II y Freddie I, que llevan a bordo cinco tripulantes del sector, elementos de la Marina y un oficial de pesca, zarparon hacia las zonas más conflictivas “bocabarras” del centro y norte del estado.
A diferencia de otros años en que el gobierno federal, a través de Conapesca, canalizaba recursos para apoyo este operativo, ahora sólo aportó oficiales de pesca y por primera vez las autoridades estatales destinarán 2 millones de pesos a estas acciones - de los 11 millones de pesos etiquetados por el Congreso local para el área de pesca.
El subsecretario de Pesca de Sinaloa, Cesar Julio Saucedo Barrón, explicó que los 2 millones de pesos se destinarán para el pago del diésel marino del operativo que durará dos meses, mientras que las embarcaciones camaroneras son aportadas por la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola de Sinaloa (Canainpesca).
Paralelamente a las embarcaciones de Mazatlán, otra zarpó de Topolobampo para sumarse al operativo.
El secretario de la Canainpesca Sinaloa, Jesús Loya, informó que el próximo mes se incorporarán otros dos barcos en las acciones, porque aunque el camarón está en veda siguen llegando muchos reportes de pesca furtiva que son enviadas a la Conapesca para que gestione lo procedente.
Señaló que las zonas más álgidas de pesca ilegal del camarón son las zonas de dónde salen los furtivos conocidas como “bocabarras” de Altata, de la Tonina.
“Donde van las embarcaciones a posicionarse son en las zonas más conflictivas zona centro y norte de Sinaloa”, indicó.
Recalcó como necesario que el gobierno federal siga apoyando estas acciones en la temporada de veda porque la pesca es una actividad desarrollada en el área federal.
JLMR