En protesta por los asesinatos de migrantes y el endurecimiento de las políticas migratorias en el gobierno de Donald Trump, a un costado del muro fronterizo en Tijuana, activistas y migrantes mexicanos quemaron una piñata con el rostro del presidente estadunidense y otra que simulaba ser un agente de la Patrulla Fronteriza.
Mientras a las piñatas las consumía el fuego, el activista y presidente de Ángeles Sin Fronteras, Sergio Tamai gritaba “migras asesinos, migras asesinos, migras asesinos”.
“Se trata de quemar el odio y todas las esencias negativas que representa el presidente de Estados Unidos, que afortunadamente con el apoyo de toda la comunidad no se va a reelegir”, expresó Hugo Castro, representante de la Coalición para los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA, por su siglas en inglés).
El mexicoamericano sostuvo además que el aún mandatario “no representa la voz del estadunidense promedio, él representa la voz de un grupo neonazi, fascista, que se resiste a los cambios”.
Durante el gobierno de Trump, 49 migrantes han sido asesinados, el último ocurrió hace ocho días en el frontera de Tijuana-San Diego, cuando un agente fronterizo asesinó a balazos al tijuanense Ángel David Villalobos Valdovinos, luego de que cruzó el muro.
Los manifestantes guardaron un minuto de silencio para recordarlo, así como a todas las personas que de manera ilegal cruzaron la frontera pero perecieron a manos de la Patrulla Fronteriza.
“Por eso promovemos el voto a favor de Biden y el voto en contra de Trump, porque ya nos están prometiendo (los demócratas) una reforma migratoria humanitaria”, dijo Castro.
Junto a una cruz de color blanco con el nombre de Jesús Migrante, la catrina se hizo presente para observar cómo eran sometidos a la hoguera Trump y el agente fronterizo.
“Me lo llevé ahorita a unas vacaciones. Fíjate, no, no pienso regresarlo, todavía no es su tiempo, pero después de las elecciones, va a ser su tiempo”, sentenció.
ledz