Los chefs Benito Molina, Solange Muris, Josefina Santacruz, Adrián Herrera, Pablo Salas, Francisco Ruano, Celia Florián y Eduardo García fueron distinguidos por el Senado de la República “por fusionar exitosamente la riqueza de la gastronomía mexicana con el cuidado medio ambiental y el compromiso social, a través de sus prácticas sostenibles”, destacó el senador Ricardo Monreal, al iniciar la ceremonia para reconocer a los chefs protagonistas del concepto Gastronomía: Arte sustentable.
“Recibimos con agrado a notables exponentes de la gastronomía nacional, que han hecho de la sustentabilidad un eje primordial de su arte culinario”, añadió el senador al darles la bienvenida a los chefs a la sede del Senado de la República.
“La gastronomía mexicana es un orgullo patrio, una herencia ancestral y patrimonio cultural de la humanidad, recoge enseñanzas de los pueblos originarios de nuestro territorio, mayas, aztecas, teotihuacanos, entre muchos otros de quienes no solo heredamos ingredientes sino recetas y técnicas tradicionales que se desarrollan en sincronía con la naturaleza y el respeto a ella”, destacó Monreal al abordar la importancia que tiene el arte gastronómico en nuestra cultura.
“Hoy contamos con la presencia de 8 chefs, hombres y mujeres cuyos nombres destacan en la gastronomía mundial, y quienes además de gozar de merecido prestigio por su arte, se distinguen por fusionar exitosamente la riqueza gastronómica mexicana con el cuidado medio ambiental y el compromiso social, caracterizado para sostener prácticas de comercio justo con productores locales y trabajadores e incluso de auxilio a poblaciones en situaciones de vulnerabilidad, como es el caso de los migrantes”, expresó el político antes de entregar los reconocimientos a los 8 chefs.
Y añadió: “Es el momento de que el Senado distinga el esfuerzo de quienes además de agradar a los paladares hacen de la cocina un espacio sostenible que conmemora los ingredientes de temporada y rescata las técnicas tradicionales que permiten el uso eficiente y respetuoso de los productos que nos otorga la naturaleza, contribuyendo a la preservación de la vida silvestre y el medio ambiente sano”.
Antes de recibir la distinción, cada uno de los chefs externó su agradecimiento y compartió la filosofía que aplican y los distingue en su quehacer cotidiano.
Chefs agradecen la distinción
Celia Florián, quien se ha distinguido por proyectar la cocina oaxaqueña, a través de sus platillos que realiza y que sirve en Las Quince letras; y es presidenta de la Asociación de Cocineras de Oaxaca, expresó: “Gracias a Dios por ser oaxaqueña y por tener tantas bendiciones al tener tanto producto, pero sobre todo los chicles, maíces y el mejor mezcal. Cuidemos nuestra madre Tierra, cuidemos el agua y el mar”.
Eduardo García chef de Guanajuato, cercano al trabajo en el campo, quien después de migrar y sufrir deportaciones abrió Máximo Bistrot en 2011, expresó: “Gracias por esta distinción y para mi es un honor ser mexicano”.
Adrián Herrera, chef formado autodidácticamente dueño de la Fonda san Francisco y El paso del norte, cuyos platillos se basan en sabores caseros de rancho y de barrio, externó: “Hace 20 años la gastronomía era una profesión individual y conforme va evolucionando, ahora es una cultura y tiene una conexión, la ecología y la sustentabilidad”, dijo
Y añadió: “Estamos preparando una iniciativa de ley, preparando el camino para que sea una materia que se integre al plan de estudios como materia en la primaria y secundaria”.
Benito Molina y Solange dueños del restaurante Manzanilla promueven platillos de pesca del día y tienen sociedad con productores de hortalizas, avicultores, pues su propuesta se distingue por ser naturalista casi en su totalidad:
Benito expresó: “Es un honor está aquí. Jamás me imaginé que iba a estar aquí, cuando empecé a cocinar; dejé la economía para ser cocinero. Y quiero agradecer a nuestros equipos, porque sin ellos no seríamos nada”.
Solange
“Gracias a México y al ingrediente, sin los productores no existiéramos, por eso es nuestra responsabilidad cuidar el mar y toda la naturaleza”.
Francisco Ruano, quien en su restaurante Alcalde, número 51 en la lista de los mejores restaurante del mundo, ha demostrado que formar sinergia es básico para salir adelante; expresó: “Quiero agradecer al Senado por el honor de estar en este recinto y quiero invitar a todos a no dejar el campo mexicano
Desde la cocina seguiremos trabajando por ser una mejor comunidad”.
Josefina Santacruz, quien en sus restaurantes Sesame y Paprika, ha logrado enriquecer la cocina mexicana con su mestizaje con sabores de Asia y Medio Oriente y ha logrado acercar comida a los migrantes; externó: “Somos resultado de un mestizaje desde que nos descubrieron. Nuestra cocina sí es resultado de influencia del mundo árabe, por eso la riqueza de nuestra gastronomía. Y en todo este mestizaje que arropamos, el único que no cambio es el maíz y en el tema de la sustentabilidad no podemos olvidar el maíz, porque seguramente después de 500 años seguirá siendo el alma de nuestra gastronomía”.
Pablo Salas, el chef mexiquense que es apasionado por sabores presentes de su estado natal; por lo que en su restaurante Amaranta traslada a los comensales a los sabores del campo, expresó: “Me siento contento y orgulloso por lo que está pasando en la gastronomía”.