Cuando era joven, Jonathan Valena quería ser pastor, pero desde hace 17 años es uno de los tatuadores más cotizados de Nueva York. Su trabajo está plasmado en celebridades como Justin Beiber, Kendall Jenner y Bella Hadid, una lista a la que se sumaron recientemente Sofía Castro y Paulina Peña.
Caracterizado por hacer diseños pequeños y minimalistas, el artista del estudio Bang Bang ha dicho que comenzó a hacer tatuajes de ese estilo porque se dio cuenta de que había un nicho de gente que era rechazado por otros artistas que no realizaban esos trazos tan delicados.
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A pesar de su cambio de vocación, Jon Boy no ha abandonado su religiosidad:
“Desarrollo muchas relaciones con mis clientes, porque creo que es lo que Dios quiere que hagamos. Él me puso en este lugar para compartir su amor, su esperanza”, dijo en una entrevista.
De hecho, fue Jon Boy quien tatuó a Justin Beiber una pequeña cruz junto al ojo. La relación entre ellos comenzó porque ambos van a la misma iglesia, Hillsong New York City.
Sus intereses también se extienden al mundo de la moda. Hace poco tiempo lanzó una colección de ropa y accesorios llamada Desert Capsule, cuyos productos aparecen agotados en su sitio web.
Sobre la relación de la moda y los tatuajes, Jon Boy ha dicho que ama “cómo los tatuajes, con su atemporalidad, se convierten en una especie de accesorios subestimados”.
Conseguir una cita con él no es tarea sencilla, pues, además de que el precio mínimo es de 500 dólares, la lista de espera se extiende varias semanas.
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