Retratar el efecto de la migración es la premisa bajo la cual ha trabajado la fotógrafa Kelly Santos Dassault desde hace 10 años, por lo que hace unos días compartió sus imágenes en la exposición Entre Mundos, que presentó en la Semana del Arte en México.
“Soy fotógrafa, mis padres son portugueses he viajado a Tijuana en los últimos 10 años para documentar la frontera y la situación de las personas que están ahí, en ese espacio entre México y Estados Unidos", dice la franco-portuguesa al iniciar la entrevista con MILENIO.
El interés y la pasión que ha provocado el fenómeno migratorio en la fotógrafa se gestó desde su tiempo de estudiante, por lo que ha podido experimentar de manera directa su origen y sus efectos.
“Estaba estudiando fotografía y siempre me han interesado mucho las cuestiones de los migrantes, sus realidades, sus inquietudes, todos esos por qués que hay detrás de tomar la decisión de dejar su Tierra, sus costumbres, su familia”.
Fue así que Kelly empezó a tomar las imágenes con las que busca humanizar la decisión de miles de personas que siempre van en busca de una vida mejor.
“Estar tanto tiempo en Tijuana me ha permitido conocer la realidad de las personas que migran, sus condiciones, sus inquietudes, hay historias que me han impactado mucho, he platicado con tantos, conozco a mucha gente en Tijuana y por eso la idea de documentar esa realidad, pero de una forma que la humanice”, precisa la fotógrafa.
Al hablar de los protagonistas de sus fotografías, comparte quienes pueden ser.
“Son esos hijos e hijas pródigos, que las madres o padres que migran en busca de una mejor situación. Es una parte de la humanidad que es pasada por alto y malentendida, arrancada de sus raíces y obligada a dejar toda una vida detrás. Estos migrantes se encuentran en una posición sumamente precaria. Miran al espectador con ojos cansados y esperanzados”.
Al adoptar el fenómeno y a sus protagonistas también tiene la intención de darles visibilidad y proyectarlos; ya que si bien el problema es bien conocido también es cierto que para la gran mayoría pasa inadvertido, porque ya se ha hecho costumbre.
“Con estas imágenes he querido darles exposición, porque mucha gente ve a los migrantes, pero no habla de sus personalidades, de sus necesidades, y a veces ni siquiera de ellos”.
Claves
La fotógrafa empezó a documentar la problemática en 2014 cuando viajo a Tijuana.
En 2023, cuando cruzaron 300 mil personas cruzaron la frontera, realizó su último viaje a la frontera antes de integrar su exposición.
Desea compartir su sensibilidad ante la problemática, por lo que espera conocer galeristas que se interesen en su muestra.
AJR