Un nuevo concepto de restaurante, bar y lounge, que ocupa el espacio de los antiguos salones de baile del Maritime Hotel llegó a Chelsea: Tao Downtown. El proyecto integra una experiencia dramática, intensa, con un acento asiático y fiel a las raíces de su cliente, Tao Group. El concepto se basa en una atmósfera oscura y sofisticada con un toque asiático. La paleta de materiales se inclinó hacia la combinación de elementos industriales y aparentes con elegantes y exuberantes detalles antiguos de Asia.
Esta ambiciosa propuesta de interiorismo desarrollada por Rockwell Group en Nueva York se divide en dos niveles: el mezzanine y el sótano, en una extensión total de 2,043 m2. El Ink Bar, el restaurante principal y lounge de Tao se localizan en la esquina suroeste de la Novena Avenida. Al llegar al lugar el visitante es recibido por el host, justo frente a una pantalla con una imagen de un dragón, un elemento y motivo recurrente en todo el diseño. Asimismo, un gran pasillo revestido de caligrafía tradicional china se observa sobre los muros de ladrillo, este corredor, dirige a los visitantes a la escalera donde se puede apreciar el gran Buda acostado, una estatua de gran formato que sirve como remate visual.
El Ink Bar se divide en tres secciones: en el centro se percibe una piedra con detalles y texturas diagonales junto con un bar más pequeño donde predomina el acabado laqueado en cada lado y se contrasta lo nuevo y lo antiguo. En una zona más privada detrás del bar, una serie de sofás en L revestidos en piel color tabaco definen un espacio exclusivo dentro del Ink Bar, ahí un candelabro metálico hace referencia a un árbol y se disfruta en un muro en piel de chagrín. Por último, dos cuartos privados observan el comedor principal inspirados en los palcos tradicionales de la ópera china. En estos espacios se pueden ver diseño gráfico inspirado en los pavorreales y cortinas de terciopelo rojas que hacen referencia al teatro.
La gran escalera dirige al visitante hacia el gran salón principal. Como complemento se diseñaron piezas personalizadas para escalera, incluyendo sillones de banquete que definen los límites y permiten tener más áreas de ocupación.
En el salón principal, justo al lado de la gran escultura de Buda Guan Yin, se ubicaron dos salas privadas para 12 y hasta 16 comensales. Estos espacios se iluminan por medio de candelabros personalizados con cables metálicos que se asemejan a las lámparas tradicionales chinas. Las mesas fueron fabricadas en madera de teca y se aprecia un detalle de metal antiguo en los bordes, rodeado de sillas revestidas en piel. Para el piso se seleccionó un granito brillante.
Por último, al TAO Lounge se puede acceder a través de una entrada separada en la Calle 16 al oeste. En ese espacio, la gran escalera con un mural de fondo de ladrillo expuesto funciona como conexión con el mezzanine y el nivel de sótano, haciendo alusión a una cueva con pergaminos y dibujos.
En el nivel de sótano, el visitante puede conocer el Lotus Bar, un espacio donde se extiende una estructura abstracta en forma de la flor de loto. De igual manera, el lounge tiene un plafón de madera con una pieza de arte que simboliza un medallón pintado, una referencia clara a los templos asiáticos. Para completar esta atmósfera, se incluye mobiliario compacto que emplea sillones largos y acogedores para crear un ambiente de club privado de manera íntima y sofisticada.
Definitivamente, TAO Downtown es un proyecto que va de acuerdo con las tendencias en espacios de hospitalidad y gastronomía a nivel mundial, el cual fusiona la cultura tradicional china con un lenguaje cosmopolita y contemporáneo, ofreciendo un resultado extraordinario y significativo.