Los gondoleros de Venecia cambiaron el domingo su sombrero y pañoleta roja por el traje de buzo y dedicaron seis horas a sacar montañas de basura del fondo del Gran Canal.
"Esto es algo que hacemos en forma gratuita para esta ciudad que nos ha dado tanto", confesó a la Lorenzo Brunello, uno de los gondoleros que buceaba.
Abandonando el tradicional traje de rayas por el impermeable que usan los buzos para protegerse de las aguas contaminadas de la laguna de Venecia, media docena de gondoleros se turnaron desde las 18:00 horas hasta la medianoche para sacar basura cerca del famoso puente de Rialto.
Lorenzo trabajó con su amigo y colega Alessandro Pulese, quien es conductor de una lancha taxi. Tan pronto como terminaron sus turnos de trabajo, se pusieron sus trajes de buzo.
Bajo los románticos canales venecianos se puede encontrar de todo: bicicletas, lavadoras e incluso televisores.
"Es otro mundo", compuesto por "estratos" de objetos más o menos viejos, entre ellos muchos radios y teléfonos de diferentes períodos, contó Lorenzo.
"Con esto mandamos un mensaje a la ciudad", explicó Alessandro Pulese, porque "amamos nuestra ciudad". Se trata de la primera vez que estos inusuales cazadores de residuos trabajaban de noche.
En el curso de la primera hora sacaron un horno de cocina, una pantalla de computadora y una lámpara, informaron las autoridades de la ciudad.
El objetivo es "sensibilizar a las personas y hacer algo concreto", añadió Lorenzo.
Los dos gondoleros-buzos, que estudiaron juntos, han hecho hasta ahora tres salidas.
"La primera vez recogimos 500 kg, la próxima vamos a llegar a 700 kg. Hablamos de toneladas de objetos, además de un neumático que pesaba unos 30 kg, por lo que retirarlo del fondo no fue fácil porque estaba anclado en el barro", precisó Lorenzo.
La operación, que cuenta con el apoyo del ayuntamiento de Venecia, que envió a Ermelinda Damiano para "mostrar el apoyo de la administración a esta admirable iniciativa de los gondoleros, que muestra el afecto y el amor por para nuestra hermosa ciudad".
Entre febrero y junio, gracias a cinco intervenciones de este tipo, fueron sacadas 2.5 toneladas de basura, según el ayuntamiento.
El proyecto, ideado por los gondoleros Stefano Vio y Alessandro Zuffi, prevé inmersiones mensuales hasta abril en el Gran Canal.
La principal vía acuática de la ciudad, que conduce a la plaza de San Marcos, suele estar entre las más visitadas de la ciudad.
RL