América tiene la misión y obligación de remontarle a Chivas para avanzar a semifinales. El juego de ida en el estadio Akron, dejó cierto malestar en el plantel, sobre todo porque tuvieron las ocasiones para marcar, y no fue una sola, pues dispusieron de cuando menos tres oportunidades para anotar de visitante. No lo hicieron y deberán ser más arriesgados en el juego de vuelta.
No hay que explorar mucho en el pasado de América para encontrar antecedentes de regresar de una desventaja en el juego de ida; apenas en la última Liguilla, la del Apertura 2019, en la que llegaron a la final; las Águilas mostraron esa capacidad para reaccionar.
De hecho, en las tres series perdieron el juego de ida, y en la vuelta tuvieron la capacidad para reaccionar e imponerse por goles a sus adversarios, aunque fue con el matiz de que en las tribunas contó con el aliento de su gente, que, en estas fases, suele generar una atmósfera a favor, algo que no podrá ser este sábado.
En los cuartos de final del Apertura 2019, las Águilas ofrecieron una lección de contundencia. El equipo de Miguel Herrera perdió el partido de ida en el estadio Azteca con Tigres por 1-2, un resultado que obligaba a los azulcrema a ir a Monterrey y marcar goles. Y lo hicieron. América terminó ganando el juego de vuelta por 2-4 (5-4 global) y lograron el pase a semifinales en un campo hostil para cualquier visitante.
En las semifinales, el equipo americanista viajó a Morelia para encarar el juego de ida, se toparon con unos Monarcas que fueron un equipo muy agresivo que encontró un triunfo por 2-0 que parecía poner a las Águilas contra la lona, porque con un gol que anotaran en el juego de vuelta obligaban a los de Coapa a marcar cuatro.
En el juego de vuelta, América mostró decisión y en el primer tiempo, con goles de Renato Ibarra y Federico Viñas, logró el marcador que le daba el pase a semifinales. En el segundo tiempo, hubo minutos de tensión, pero no más goles. Con un buen juego se impusieron al equipo de Pablo Guede que tenía buenas prestaciones.
Y en la Final contra Rayados también perdieron el juego de ida en el estadio BBVA por 2-1. El juego de vuelta lo remontaron también por 2-1, un juego con una carga de polémica por el arbitraje de César Arturo Ramos que le anuló un gol a las Águilas, no les marcó un penal y tampoco expulsó a Leonel Vangioni, quien terminó marcando el penal definitivo para Rayados.
América ya demostró en la última Liguilla que sabe sobreponerse a resultados adversos, solo hay dos jugadores de ese último plantel que ya no están en el club: Guido Rodríguez y Renato Ibarra, pero la capacidad de reacción la siguen teniendo. Chivas no puede estar confiado.
HRL