La sinergia entre el Cruz Azul y el Estadio Azteca es legendaria. Fue en este escenario en donde La Máquina logró aquella gran hegemonía, impuesta sobre todo el futbol mexicano, en los años setenta. Un conjunto que llegó desde Ciudad Jasso, sitio en donde tenía como casa el modesto Estadio 10 de diciembre, para –posteriormente- aterrizar en la capital, para tener como sede el Coloso de Santa Úrsula.
El resultado de esa dinastía, derivó en cinco de los ocho título que la institución atañe hasta la fecha; un dominio que, al arrancar la década de los ochenta, colocó al conjunto cementero como el segundo más ganador del balompié nacional, únicamente por debajo de las Chivas.
Esta amalgama se patentó, casi de manera fiel, durante el Apertura 2018, torneo en donde los celestes regresaron al Azteca luego de 22 años de estancia en el Estadio Azul.
Y, justamente, esa fue una de las cuestiones que distinguieron a Cruz Azul durante el torneo pasado, esto al sacarle un gran provecho a su condición de local en el Coloso de Santa Úrsula, lugar en donde el equipo celeste se mantuvo imbatible, cosechando 25 de los 36 puntos que obtuvo en el certamen, mismos que le permitieron quedarse con el liderato general.
INVICTO FRÁGIL
Sin embargo, conforme más extiendas una racha (buena o mala), en cualquier momento estará más propensa a romperse. Y eso es lo que le ha ocurrido a Cruz Azul. Poco a poco los contrincantes han encontrado el modo de contrarrestar a La Máquina en este escenario.
De momento, la gran prueba está en lo sucedido durante los dos últimos encuentros del equipo celeste como local en el Coloso de Santa Úrsula. Dos Clásicos, dos derrotas. Perdieron ante el América, en la Final de vuelta del Apertura 2018, y ante Chivas, en su primer duelo en casa en el presente Clausura 2019.
Pero la fragilidad de Cruz Azul en el Azteca ya era palpable desde varios encuentros previos. Al momento, entre Liga y Copa, La Máquina ha disputado 17 encuentros en este inmueble, con una marca muy favorable, la cual arroja un récord de 11 triunfos, cuatro empates y dos derrotas, contando –además- con un saldo de 27 goles a favor y 10 en contra.
No obstante, los 17 encuentros de los de La Noria en el Coloso de Santa Úrsula se dividen en dos partes: Los primeros 9 choques y los últimos ocho, en donde las realidades son completamente distintas.
Del 21 de julio al 2 de octubre
Cruz Azul comenzó de gran forma el Apertura 2018. En lo que respecta a sus primeros nueve encuentros en casa, La Máquina tuvo marca de ocho triunfos y sólo un empate; en estos partidos, los cementeros vencieron a equipos como Tigres (1-0), León (3-0) y Toluca (1-0). El saldo, en goles, fue de 20 a favor y únicamente tres en contra.
Del 6 de octubre al 12 de enero
En los duelos restantes, si bien los celestes mantienen una racha positiva, el panorama ha sido mucho más complicado. En estos ocho choques, los de La Noria comenzaron perdiendo en cinco de ellos; en tres lograron regresar, consiguiendo el triunfo en dos ocasiones (Monterrey y Lobos BUAP, ambos en temporada regular) y empatando en uno más (León en Copa MX).
Sin embargo, en los dos restantes, perdieron (América, en la Final, y Chivas). Sólo en un par de estas ocho ocasiones, el Cruz Azul tomó ventaja (Querétaro y Monterrey, en liguilla).
COMPARATIVA FINAL