El León de la Liguilla sigue igual de reconocible al de la fase regular. Es un equipo bien estructurado que no tiene freno, que no sabe de conformismo y que tiene en la mente clara que para aspirar al título debe mantener las revoluciones a tope, venciendo a Tijuana y convirtiéndose en el segundo semifinalista del torneo.
Salió el equipo de Ignacio Ambriz con la misma hambre, parecía que era el equipo obligado a marcar goles, porque apenas pitó el árbitro fue como perro al hueso a buscar el arco de Gibran Lajud.
Los esmeraldas se la pasaron un año sin Liguilla y ahora que están de vuelta y en condición de líderes, lo que menos quieren es conceder a sus rivales alguna opción. Pese a que la ventaja del juego de ida era lapidaria, no tardaron en marcar ese gol que desmoralizara a Tijuana.
El equipo de Óscar Pareja no tuvo tiempo de ilusionarse con una posible remontada, porque a los 9 minutos llegó el primer gol de Joel Campebell, y fue gracias al sello que le ha dado Ambriz a su escuadra. Una pelota larga de Montes a la espalda de los zagueros la controló el atacante tico, quien remató cruzado con la derecha para doblegar Lajud.
Lo que vino después fue el León que marcó la pauta durante la fase regular, un equipo con un estilo de juego claro y fácil, que lastima con las buenas conexiones de sus futbolistas y que cada vez que tiene la pelota en su poder se lanza en busca del arco contrario.
Y no se puede decir que Tijuana no lo intentara, el asunto es que se topó con un bloque de futbolistas que lo mismo ofenden y defienden. Ese también es mérito de Ambriz, que ha convencido a todos de pelear por el fin común. Y cuando los Xolos parecieron tomar un aire de valentía, lo único que encontraron fue el segundo gol en contra.
La Fiera montó un contragolpe vertiginoso, recuperó la pelota en defensa y luego Montes, Macías y Mena pusieron el pedal en el acelerador, toques rápidos y efectivos que acabaron con un centro de Mena para Campbell, el costarricense no desperdició la ocasión y definió con un sólido cabezazo al que Lajud solo vio como acaba la pelota en la red.
Vino entonces una dosificación del cuadro local, tenía al borde del nocaut a los fronterizos, así que se dedicó a cazar a su rival para liquidarlo en el momento justo. Y fue en ese bajón de La Fiera que Xolos encontró un gol que aminoró su estado emocional.
Bolaños filtró una pelota a la que Bou llegó en el área, el argentino remató con la derecha para vencer a Cota y poner el 2-1.
Cualquier esperanza de una rebeldía de Tijuana la apagó el mismo León, que recuperó la ambición en el segundo tiempo y pudo marcar el tercero, pero no estuvo fino y dejó ir varias opciones.
Aunque Tijuana logró el empate, el VAR lo anuló por fuera de juego de Bou.
León luce muy sólido, la etiqueta de candidato no le pesa, al contrario, parece que le ajusta a la perfección, ya está en la antesala de la final y sigue siendo el máximo candidato.