En 2004, el equipo mexicano Santos Laguna fue víctima del llamado robo 'Monumental' en la Copa Libertadores, pues ese "error" hubiera metido a los guerreros en la siguiente ronda y otra historia se estuviera contando.
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El portal de Medio Tiempo recordó aquel encuentro de Vuelta de la ronda de octavos de final, presente en la memoria de los fanáticos por el histórico triunfo del equipo lagunero en casa de River Plate que, sin embargo, quedó marcado por el mal arbitraje.
Recuerdo 'infame'
En esa ocasión, Santos llegó a Nuñez con la misión de remontar a un equipo que contaba en su plantel con jugadores de la talla de Javier Mascherano, Lucho González, Eduardo Coudet, Marcelo Salas, Marcelo Gallardo y Fernando Cavenaghi.
En el tiempo regular, Santos ganó 2-1 empatando el marcador global a dos goles, por lo que el pase a los Cuartos de Final tuvo que definirse en la tanda de penaltis, donde el árbitro Carlos Torres perjudicó a los laguneros.
El tercer penal de la tanda de River fue ejecutado por el Rolfi Montenegro y Christian Lucchetti detuvo el potente disparo que fue al centro, pero el silbante decidió repetirlo, pues consideró que se adelantó el arquero, algo que en todas las repeticiones de la televisión se mostró que no había sido así.
Guerreros históricos
Muy recordada es aquella plantilla, reforzada en el poco tiempo que duró Carlos Ahumada como dueño del equipo, con el argentino Christian Lucchetti en el arco, Héctor López, Argemiro Veiga, Sixto Peralta, Jared Borgetti, Matías Vuoso, Rodrigo Ruiz, Héctor Altamirano, Federico Domínguez, Carlos Cariño, Joahan Rodríguez, José Antonio Noriega; dirigidos por Eduardo de la Torre.
Dennis Caniza recordó que al final del partido que algunos de sus compañeros querían golpear al árbitro e incluso buscaban en qué hotel se encontraba hospedado.
"Después del juego Federico Domínguez y Lucchetti querían irle a pegar al árbitro, querían saber dónde se quedaba. Era tanta la rabia que sentían porque legítimamente los estaban eliminando y con ayuda arbitral el eliminado fue Santos".
Así fue el robo
Después de que Salas y Borgetti anotaron los primeros penales, un Lucchetti inspirado, detuvo el cobro de Cavenaghi, sin embargo el “Pony” falló.
Pero Lucchetti no estaba dispuesto a perder el partido y atajó también el cobro de Montenegro, pero esto ya no le pareció a los árbitros, sobre todo al Asistente 1 Ricardo Grance que, sin razón, fue con el juez Central Carlos Torres para decirle que Luchetti se había adelantado y debía repetir el penal.
Una mentira total, porque el portero del equipo lagunero nunca se movió de la línea de gol. Después fue todo rutina, los silbantes consiguieron su objetivo que era desconcentrar a Lucchetti y darle el triunfo a River Plate. Cariño se encargó de fallar y River anotó los que restaban.
RCM