Cruz Azul necesitaba sumar los tres puntos de manera urgente. Y sí, lo logró sin ofrecer el mejor juego, pero con una mayor intensidad de la que había mostrado en los últimos encuentros. A La Máquina de Reynoso le está costando encontrar la portería rival, pero al menos anoche a través de la pelota parada halló un poco de alivio. 1-0 sobre Querétaro y se trepa a la cuarta posición.
El futbol es de momentos y la única noticia positiva para Cruz Azul –porque su nivel aún está lejos de lo esperado– es que tiene 24 puntos, un lugar seguro en la repesca, y está de momento en los puestos de Liguilla directo. Nada mal para su crisis.
Anoche fue un juego malo, donde Querétaro estuvo más cerca en el primer tiempo por las dudas e inseguridades que provoca Sebastián Jurado en las salidas. Gallos no aprovechó y La Máquina mejoró en el complemento, sobre todo con Uriel Antuna por derecha.
En una jugada, en la que el Brujo cedió la pelota a Cristian Tabó, parecía que llegaba el primer tanto, pero se invalidó por un fuera de lugar; después sí llegó el premio, en un tiro de esquina donde Julio César Domínguez peinó a segundo poste, apareció Pablo Aguilar para mandarla al fondo de las redes.
Después La Máquina resistió los leves embates de Gallos, que justo en la compensación tuvo la más clara en un disparo al poste, y luego en un remate al cuerpo de Jurado. No hubo para más. Cruz Azul es cuarto lugar con un juego que no agrada a nadie, pero con estos tres puntos al menos tendrá tranquilidad para trabajar la recta final de este campeonato.
MGC