China realizó pruebas de coronavirus a casi 10 millones de personas en poco más de dos semanas en Wuhan, la ciudad donde comenzó la pandemia, informaron las autoridades, encontrando sólo unos pocos cientos de casos positivos.
Las autoridades chinas afirman haber controlado en gran medida el virus, pero los funcionarios de Wuhan, temerosos de una segunda ola de contaminaciones- lanzaron el programa después de que surgieran nuevas infecciones desde que la ciudad reabrió sus puertas en abril, tras dos meses de encierro.
Más de 9.8 millones de personas realizaron la prueba en esta ciudad de 11 millones de habitantes, entre el 14 de mayo y el 1 de junio, dijeron los funcionarios en una conferencia de prensa.
También agregaron que los 300 resultados positivos eran pacientes asintomáticos.
Los residentes hicieron cola por toda la ciudad en lugares improvisados, instalados bajo tiendas de campaña, en estacionamientos, parques y zonas residenciales.
Durante dicho período se realizaron medio millón de exámenes médicos por día.
Las personas asintomáticas no parecen haber infectado a otras personas, dijo Lu Zuxun, un experto en salud pública de la universidad de Ciencia y Tecnología de Wuhan en Huazhong.
El virus apareció por primera vez en Wuhan a finales del año pasado, pero los casos han disminuido drásticamente desde el máximo alcanzado a mediados de febrero.
El número oficial de muertos en el país, de 1.400 millones de personas, asciende a 4.634, la mayoría en Wuhan, cifra mucho menor que en otros países más pequeños.
Sin embargo, la fiabilidad de las cifras en China es muy cuestionada, especialmente por Estados Unidos que acusa a Pekín de no haber compartido toda la información sobre el virus con la comunidad internacional.
El maratón de pruebas de detección de coronavirus en Wuhan le costó al gobierno de la ciudad unos 900 millones de yuanes (127 millones de dólares), según confirmó el vicealcalde Hu Yabo el martes.