Las autoridades rusas suspendieron hoy el uso de un modelo de respirador artificial que podría estar relacionado con dos incendios registrados en hospitales con enfermos de coronavirus.
El uso de los respiradores Aventa-M, fabricados en Rusia desde el 1 de abril y que también fueron enviados a Estados Unidos, queda suspendido, informó el organismo de vigilancia sanitaria Roszdravnadzor.
Cinco pacientes en cuidados intensivos fallecieron ayer en un incendio en un hospital de San Petersburgo que trataba a enfermos del nuevo coronavirus. Otro paciente murió en un incendio en un hospital en Moscú.
Según las autoridades, estos accidentes se produjeron por un "cortocircuito" en los respiradores Aventa-M. Más de 7 mil unidades iban a ser entregadas a hospitales rusos de aquí a finales de año.
Decenas de estos modelos de respiradores también fueron enviados a Estados Unidos en abril para ayudar al país en su lucha contra la pandemia. Según medios de comunicación estadounidenses y rusos, no fueron usados y serán reenviados a Rusia próximamente.
Los respiradores artificiales son cruciales para salvar vidas porque permiten la ventilación artificial de los pulmones de los pacientes que sufren graves neumonías provocadas por el virus.
Rusia es el segundo país del mundo más afectado por la pandemia del nuevo coronavirus, por detrás de Estados Unidos, con 242 mil 271 casos. La tasa de mortalidad sigue siendo relativamente pequeña con respecto a los contagios y hasta el momento 2 mil 116 personas fallecieron, según las cifras oficiales.
jamj