El grupo ecologista Just Stop Oil llevó a cabo este martes una acción de protesta en Downing Street, donde se encuentra la residencia y oficina del primer ministro británico, para exigir la prohibición de nuevas exploraciones de yacimientos de energías fósiles.
Videos difundidos en redes sociales muestran a activistas tratando de escalar las verjas de entrada a esa calle antes de ser interceptados por la policía.
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Según el grupo, otros miembros se sentaron en la calzada en Whitehall, la calle que conduce a Downing Street, desplegaron pancartas y algunos se pegaron a la calzada.
En un comunicado, la organización exigió al gobierno que renuncie a "nuevos proyectos petroleros y gasistas".
"Esta política genocida matará a miles de personas sin lograr enfrentar la peor crisis de coste de vida que este país haya visto jamás", agregó, pidiendo un impuesto excepcional sobre los beneficios de las compañías petroleras.
Ante la intención del nuevo gobierno de legislar para luchar contra las tácticas de "guerrilla", Just Stop Oil, del que seis de sus miembros se encuentran actualmente presos por distintas acciones, dijo que no se dejará "intimidar" ni "silenciar".
El grupo ha llevado a cabo en el último mes una serie de acciones polémicas, desde lanzar sopa y puré a cuadros célebres (sin dañarlos) a arrojar una tarta a la estatua de cera del rey Carlos III en el museo Madame Tussauds.
Tras la acción del martes, el grupo indicó que hará una "pausa de su campaña de resistencia cívica" que inició en octubre para "dar tiempo" al gobierno para "reflexionar sobre su responsabilidad con el país".
"Si, como lo esperamos lamentablemente, no recibimos ninguna respuesta de los ministros a nuestras demanda de aquí al viernes 4 de noviembre, intensificaremos nuestras perturbaciones legales contra este gobierno traidor", advirtió el grupo.