El Yunque está más cerca que nunca de llegar al poder… en España

El grupo clandestino navega con Vox hacia los competidos comicios del domingo. Experto en ultraderecha asegura que El Yunque influyó en la “deformación” de Santiago Abascal.

España celebrará sus elecciones este domingo 23 de julio (Ilustración: Mauricio Ledesma)
Ciudad de México, México /

De la mano del Partido Popular (PP), la fuerza política de extrema derecha Vox podría por primera vez formar parte del gobierno español, incorporando una ideología que abreva de la organización clandestina El Yunque, de origen mexicano, la cual patrocinó a los radicales ibéricos desde finales del franquismo.

Las competidas elecciones generales de este domingo en España abren la rendija para que Vox continúe colocando funcionarios formados por El Yunque mexicano, como ya lo ha hecho desde 2019. En caso de que gane el PP, se esperaría un acuerdo con los ultra conservadores, quienes estarían en condiciones de ponerle condiciones al próximo gobierno de aquel país.

Santiago Mata, autor de Vox y El Yunque: la sociedad secreta que hizo grande a Santiago Abascal, explica en entrevista con MILENIO que el hoy líder de Vox “era un miembro poco destacado del PP y fue promocionado ‘en sociedad’ por 'El Yunque'.

En 2013, cuando el gobierno de Mariano Rajoy (PP) enfrentaba una crisis económica, Abascal separó a su corriente del partido para formar el suyo, con una postura extremista que se resume en la máxima acusatoria con la que suele flagelar a sus ex compañeros: la de que son “una derechita cobarde”, una frase que ha sido copiada por el actor Eduardo Verástegui y sus simpatizantes, quienes repiten que los del PAN son “una derechita cobarde”.

Sobre la relación entre la matriz mexicana y su vertiente española, el historiador católico castellano asegura “que en la medida en que es una auténtica organización, tienen unos jefes, y entiendo que en la cúspide, estos siguen siendo mexicanos”.

En todo caso, el peso del Yunque en Vox es “el que Santiago Abascal quiera darle”, añade Mata. “Lo único importante es que Vox es un partido dictatorial donde solo manda una sola persona, así que El Yunque puede haber influido en la formación, o más bien deformación, de esa persona (Abascal), pero ahora él hace lo que le da la gana, tanto con sus amigos del Yunque como con quienes no son del Yunque, que serán la inmensa mayoría de quienes le rodean”.

Propaganda política del partido VOX en Madrid / EFE

Vox empodera a yunquistas

La colocación de funcionarios formados por El Yunque mexicano ya ha ocurrido en el Congreso y en instancias autonómicas, provinciales y municipales, como resultado de los comicios generales de 2019, los regionales de mayo de 2023 y distintos procesos locales. Ahora, gracias a que al Partido Popular (que en dos ocasiones logró gobernar en solitario, de 1996 a 2004 y de 2011 a 2018) ahora le resultan indispensables los votos de Vox para tener opciones de encabezar el Estado español, la influencia yunquista podría asentarse finalmente en el Palacio de la Moncloa.

“El Yunque comenzó en España con la llegada, hacia 1976, del mexicano Miguel Ángel López Zabaleta, y siguió dependiendo a todos los efectos de la matriz mexicana”, responde Santiago Mata, experto en el grupo encubierto, “hasta que, a fines del siglo pasado y a principios de este, desarrolló algunas tapaderas con cierto peso social, en concreto Profesionales por la Ética y Hazte Oír”.
Españoles colocando propaganda política del VOX / Reuters

Aunque fueron miembros de El Yunque quienes patrocinaron el ascenso de Santiago Abascal dentro del Partido Popular, hasta que provocó una escisión para formar Vox, Santiago Mata precisa que no se puede decir que Abascal pertenezca a la organización ni que ésta tenga capacidad de influir en sus decisiones, pues el jefe de Vox ejerce un liderazgo “dictatorial”.

Sin embargo, Vox tiene una ideología españolista católica radical que corresponde a la de El Yunque y se presta como vehículo de acceso al poder de miembros de sus organizaciones fachada.

En una ciudad de talante progresista como Barcelona, parece poco probable que un fundador de El Yunque español haya llegado al Consistorio del Ayuntamiento. Pero Liberto Senderos Oliva, quien participó en la fundación del grupo como tesorero, fue elegido en las elecciones de mayo pasado como uno de los dos concejales logrados por Vox.

“De México venía el dinero”

López Zabaleta y otros mexicanos yunquistas, como Federico Müggenburg y Bernardo Ardavín Migoni, apadrinaron la versión española de su agrupación clandestina durante los años 70, en la fase final del franquismo, que además de a Senderos Oliva, tuvo a Eduardo Herfeltder como presidente y a Jaime Urcelay Alonso como vicepresidente. Años más tarde, como cara visible, crearon la asociación Hazte Oír, cuyo brazo internacional –incluso con presencia en México– se llama CitizenGo, y más adelante la Organización del Bien Común España.

Ante una corte judicial de Madrid, en 2014, la española Victoria Uroz Martínez, ex integrante de Hazte Oír, declaró: “A mí me explicaban que de México venía dinero para sufragar todos los gastos que tenían porque aquí no los podían nunca sufragar, era imposible sufragar todas las actividades que hacían. Luego, al venir los directivos de México, comprendí que sí, que realmente sí los fiscalizaban a dónde iba el dinero”.

Ese juicio fue resultado de una demanda por difamación presentada por el director de Hazte Oír, Ignacio Ursuaga, contra Fernando López Luengos, el autor de un informe conocido como El Transparente, que le fue encargado por la Conferencia Episcopal para aclarar la existencia del grupo clandestino. Y lo perdió: el tribunal acreditó que al menos siete ciudadanos españoles pertenecían a El Yunque. Además, ocho obispos se manifestaron en contra de sus actividades por su carácter secreto, que contraviene la doctrina de la Iglesia.

Sus miembros tienen el mandato explícito de negar su pertenencia a El Yunque y actúan a través de organizaciones fachada de médicos, abogados, padres de familia y otras, con posturas pro-vida, homofóbicas y xenófobas. Y así como en México se infiltraron en el PAN, en España actuaron desde el PP.

Brigada conservadora Gómez Morín / Notimex

El Yunque al poder

Después de años de malos resultados, el crecimiento de Vox empezó en las elecciones regionales de 2019, en las que entró por primera vez en las instituciones, llevando consigo a varias figuras yunquistas: de la directiva de Hazte Oír, Francisco José Contreras y Agustín Rosety se hicieron diputados del Congreso; otras además ingresaron a las asambleas de Madrid y de Murcia y en el Ayuntamiento de Sevilla.

Este mayo, además de Senderos Oliva, entre otras personas destaca la nueva presidenta del parlamento (Corts) de la Comunidad Valenciana, Llanos Massó, quien también proviene de Hazte Oír.

Según los sondeos, no se puede asegurar que el PP, con entre 31 a 35% de las intenciones de voto, y su aliado Vox, con entre 11 y 14%, puedan lograr una mayoría de gobierno en las elecciones del domingo, pero es posible. Y eso significaría la llegada a La Moncloa de Santiago Abascal y sus compañeros, probablemente incluyendo a los yunquistas.

Aspirante presidencial Eduardo Verástegui / Jesús Quintanar

Vox ha mostrado su voluntad de regresar o reconectar con sus orígenes con repetidas visitas proselitistas de sus líderes a México, en donde Verástegui ha agudizado sus críticas al PAN y expresado su intención de lanzarse como candidato independiente a la Presidencia, mientras que personas del entorno del Yunque han manifestado su deseo de crear un partido a la derecha del panismo, siguiendo el ejemplo español.

En este proyecto, pueden contar con el trumpismo estadounidense como aliado. Durante la versión mexicana de la Conferencia de Acción Política Conservadora, realizada en noviembre de 2022, la presencia del europarlamentario de Vox, Hermann Tertsch, quedó en segundo plano tras las participaciones en video de Donald Trump y su ideólogo Steve Bannon, quienes felicitaron a Verástegui por sus aspiraciones presidenciales.

aag

  • Témoris Grecko
  • Periodista, documentalista y analista político que ha cubierto conflictos sociales y armados en 95 países y territorios, publicado siete libros y escrito cinco documentales.

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