El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, sugirió "respetuosamente" que el presidente Donald Trump acepte su derrota tras confirmarse el resultado de las elecciones en la reunión del Colegio Electoral, añadiendo que cuando fue vicepresidente era mi responsabilidad anunciar el resultado" del ganador.
Biden dijo que los funcionarios electorales locales y los trabajadores soportaron amenazas de violencia y abuso verbal mientras aseguraban que la democracia prevaleciera en las elecciones de noviembre, y añadió que Trump "se ha negado a respetar la voluntad popular".
"Es una posición tan extrema que nunca antes la habíamos visto. Una posición con la que se ha negado a respetar la voluntad popular, se ha negado a respetar el estado de derecho y se ha negado a honrar nuestra Constitución", dijo Biden en un discurso después de que el Colegio Electoral confirmara su victoria.
Trump se ha negado a admitir la derrota en las elecciones haciendo repetidas e infundadas acusaciones de fraude generalizado.
En su discurso, Biden dijo que las amenazas a los funcionarios electorales eran “simplemente inconcebibles”, pero que los trabajadores demostraron "coraje y compromiso" por unas elecciones libres y justas ante la pandemia del covid-19.
Añadió que los abogados del presidente Trump trajeron "decenas y decenas y decenas" de impugnaciones legales de los resultados de las elecciones, pero que en cada ocasión se descubrió que carecían de fundamento.
Biden afirmó que el equipo de Trump presentó argumentos repetidamente a las legislaturas estatales, los funcionarios e incluso la Corte Suprema de los Estados Unidos, "y en todos los casos no se encontró ninguna causa o evidencia para revertir, cuestionar o disputar los resultados".
Biden dijo que su victoria en el Colegio Electoral fue la misma magnitud que la del presidente Donald Trump en 2016, añadiendo que es una señal de que Trump finalmente debería aceptar su propia derrota en las elecciones de este año.
Señaló durante su discurso en Wilmington (Delaware) que Trump calificó su recuento de 306 votos electorales de 2016 como un "deslizamiento de tierra", y dijo que si eso constituía una clara victoria entonces, que debería aceptar su derrota.
Con información de AP y AFP
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