El presidente de Estados Unidos estaría planeando su próxima candidatura presidencial para 2024 de forma secreta, esto como posible revancha contra la victoria del demócrata Joe Biden, de acuerdo con The Washington Post.
Según el diario, el mandatario busca afirmar públicamente que ganó las elecciones del pasado 3 de noviembre y se prepara para un segundo mandato; sin embargo, está manteniendo conversaciones telefónicas y reuniones privadas en búsqueda de regresar a la Casa Blanca.
Se estima que Trump podría anunciar su candidatura presidencial en las próximas tres semanas, con el fin de congelar cualquier otra aspiración presidencial entre las que destacan el actual vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, el secretario de Estado, Mike Pompeo, y la ex embajadora estadunidense ante las Naciones Unidas, Nikki Haley.
Varias personas allegadas al mandatario, consultadas por el diario, afirmaron que Trump podría dominar la agenda política del Partido Republicano en los próximos años, siendo un posible "líder moral" del mismo en camino a las elecciones presidenciales dentro de cuatro años.
Aseguraron que Trump haría toda una campaña política después de haber salido de la Casa Blanca, ya sea como respaldo a otros candidatos republicanos, ser el líder del partido, así como crear un comité de acción política para obtener fondos ante lo que podría ser su próxima carrera presidencial. Sin embargo, reiteraron que aún sus decisiones pueden no concretarse debido a los cambios de decisiones que realiza constantemente el mandatario.
Trump también estaría buscando formas de obtener ingresos, ya sea con mítines después de la presidencia, programas de televisión o sus memorias como inquilino de la Casa Blanca, esto ante los problemas financieros que enfrentará terminando su periodo lleno de deudas.
"Si puedes (conseguir) que se presenten 30 mil personas y les cobras 5 dólares, eso es dinero real", dijo un republicano en contacto frecuente con la Casa Blanca.
El estratega republicano, Brendan Buck, afirmó al diario que la cuenta de Twitter del mandatario será clave para su periodo pospresidencial, así como cualquier acción que pueda ejercer después de abandonar la Casa Blanca el próximo 20 de enero de 2021. El respaldo entre los republicanos a Trump es superior al 80 por ciento.
"Su cuenta de Twitter, por detestable que sea, es una de las herramientas más poderosas que tiene, y puede llevarse eso con él", dijo Buck, al diario. "No pretendamos que su influencia sobre el Partido Republicano se basó en su gobierno o en sus opiniones políticas", dijo Buck. "Fue su capacidad para usar su voz en voz muy alta y atraer la atención sobre sí mismo, y eso no va a cambiar".
dmr