El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió con un grupo de senadores republicanos que propusieron un paquete de ayuda para el coronavirus reducido de 618 mil millones de dólares, una fracción de los 1.9 billones de dólares que busca la actual administración, mientras los demócratas del Congreso prometían seguir adelante con o sin poyo del Partido Republicano.
Biden se encontró con los legisladores en la Oficina Oval, bromeando diciendo que se sentía "de vuelta en el Senado" cuando comenzaron la sesión privada. Él y la vicepresidenta Kamala Harris estaban escuchando el discurso de los republicanos a favor de un paquete de ayuda contra la pandemia más reducido y más específico, que acabaría con las prioridades demócratas pero que podría ganar el apoyo del Partido Republicano y apelar a su esfuerzo por unificar el país.
La propuesta del grupo republicano aprovecha la urgencia bipartidista para apuntalar la distribución de vacunas en el país y expandir enormemente las pruebas de virus con 160 mil millones de dólares en ayuda, similar a lo que ha propuesto Biden.
Pero a partir de ahí, los dos planes divergen drásticamente. Menos enfocados en la ayuda económica, los pagos directos de mil dólares propuesto por los republicanos irían a menos hogares que la propuesta de los mil 400 dólares que los demócratas han propuesto.
Tampoco darían nada a los estados, dinero que los demócratas argumentan es igual de importante, con 350 mil millones dólares en el plan de Biden para mantener a la policía, los bomberos y otros trabajadores en el trabajo. Atrás quedaron las prioridades demócratas, como el aumento gradual del salario mínimo federal a 15 dólares la hora.
Al involucrar a la Casa Blanca en conversaciones bipartidistas de alto perfil, los demócratas de la Cámara y el Senado anunciaron que seguirían adelante, sentando las bases para aprobar el paquete de Biden con un proceso que no dependerá del apoyo republicano para su aprobación. Los senadores republicanos invitados a reunirse con Biden son Lisa Murkowski, Mitt Romney, Shelley Moore Capito, Todd Young, Jerry Moran, Mike Rounds, y Thom Tillis.
El líder de la mayoría en el Senado, el demócrata Chuck Schumer, advirtió que la historia está llena de "los costos del pensamiento pequeño".
“El costo de la inacción es alto y está creciendo, y ahora es el momento de tomar medidas decisivas”, dijeron él y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, en un comunicado conjunto.
El objetivo es aprobar el plan de alivio contra el covid-19 para marzo, cuando expiren la asistencia adicional por desempleo y otras ayudas pandémicas.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que hay "obviamente una gran brecha" entre el paquete de 1.9 billones de dólares que ha propuesto Biden y la contraoferta de 618 mil millones de dólares.
Psaki dijo el lunes que la reunión con los legisladores republicanos sería un "intercambio de ideas", pero Biden reiteraría su postura de que "el riesgo no es que sea demasiado grande, este paquete, el riesgo es que sea demasiado pequeño".
Una invitación a los senadores republicanos para reunirse en la Casa Blanca se produjo horas después de que los legisladores enviaran a Biden una carta el domingo instándolo a negociar en lugar de intentar aprobar su paquete de ayuda únicamente con los votos demócratas.
“Reconocemos sus llamados a la unidad y queremos trabajar de buena fe con su Administración para enfrentar los desafíos de salud, económicos y sociales de la crisis del covid-19”, escribieron los 10 senadores republicanos a Biden. "Compartimos muchas de sus prioridades".
La piedra angular del plan republicano son 160 mil millones para la respuesta de atención médica: distribución de vacunas, una "expansión masiva" de pruebas, equipo de protección y fondos para hospitales rurales, según un borrador.
Otros elementos del paquete son similares al plan de Biden pero en cantidades mucho menores, con 20 mil millones de dólares para reabrir escuelas en comparación con 170 mil millones. Los republicanos ofrecen 40 mil millones de dólares para ayuda comercial del Programa de protección de cheques.
La reunión que está siendo organizada por Biden representaría la mayor participación pública para el presidente en las negociaciones para la próxima ronda de alivio del virus. Ganar el apoyo de 10 republicanos sería significativo para Biden en el Senado que está dividido entre ambos partidos y en que la vicepresidenta Kamala Harris es el voto de desempate.
La Casa Blanca mantiene su compromiso de explorar vías para el bipartidismo incluso mientras se prepara para que los demócratas avancen solos en un proyecto de plan de alivio de covid-19, según un alto funcionario de la administración al que se concedió el anonimato para discutir el pensamiento privado.
Sin embargo, el número que trajeron los republicanos a la mesa se consideró demasiado pequeño, según el funcionario. Al mismo tiempo, la Casa Blanca puede estar dispuesta a ajustar su pedido, quizás cambiando algunos aspectos menos orientados al virus a un paquete posterior que se presentará ante el Congreso, dijo el funcionario.
El propio Biden ha estado hablando por teléfono con algunos de los republicanos que asistirán a la Casa Blanca el lunes y se espera más contacto en persona en los próximos días, dijo el funcionario.
dmr