Un aumento de sueldo a los bomberos de Estados Unidos es la nueva estrategia del gobierno federal para incentivar el arduo trabajo que estos equipos realizan durante la ola de calor y la sequía que azota la costa oeste del país.
Así lo anunció el presidente Joe Biden durante una reunión virtual con los gobernadores de ocho estados del oeste: California, Oregón, Washington, Colorado, Nevada, Nuevo México, Utah y Wyoming. "Tenemos que actuar, y actuar rápido. Ya vamos tarde", dijo.
La medida llega mientras unos 36 incendios arden en estados como California, Oregón, Washington, Colorado y Arizona; en muchos casos alimentados por la intensa ola de calor en la que se han llegado a registrar temperaturas cercanas a los 50 grados centígrados.
Biden volvió a vincular la ola de calor con la crisis climática, que a su juicio ha convertido los incendios en un problema que "ya no es estacional, sino del año entero", por lo que su administración ha permitido que los bomberos que trabajan en terrenos federales mantengan su puesto más allá de la temporada estival.
El mandatario consideró "inaceptable" que muchos de los 15 mil bomberos contratados para combatir incendios en tierras federales cobren 13 dólares la hora, y anunció que se les subirá el salario a un mínimo de 15 dólares la hora para el resto del año, además de darles acceso a bonos de peligrosidad.
"Estos valientes hombres y mujeres (bomberos) asumen un riesgo increíble al correr hacia el fuego, y merecen que se les pague buenos salarios", subrayó Biden.
Biden prometió trabajar con el Congreso para conseguir mejoras de sueldo y condiciones permanentes para esos bomberos, porque la subida actual no puede mantenerse a largo plazo sin el visto bueno de los legisladores.
El presidente se comprometió a tratar el problema de los incendios con la misma intensidad con la que aborda cada año la temporada de huracanes, al asegurar que la situación es "peor" cada año debido a la crisis climática.
Por eso, aseguró que su gobierno intensificará su uso de tecnologías emergentes y de satélite para detectar rápidamente nuevos incendios, y que añadirá datos sobre esos fuegos a una aplicación de móvil con la que los estadunidenses pueden vigilar la calidad del aire en su zona.
evr