Donald Trump volverá a ser presidente de Estados Unidos, y aunque parece que estamos regresando a 2016, el magnate pasó una 'demoledora republicana' sobre Kamala Harris y el Partido Demócrata, ya que además de gobernar durante otros 4 años desde la Casa Blanca, tendrá el control del Senado y de la Cámara de Representes.
Estos resultados no se dieron solos, pues luego de una agresiva campaña en los estados péndulo y promesas de campaña que van desde una dura política migratoria hasta la resolución de guerras en Europa, las elecciones diplomáticas que se despachen desde Washington cambiarían el papel que EU tiene en la política internacional.
Ante la duda que genera el regreso de Donald Trump a la presidencia, MILENIO consultó al internacionalista y catedrático de la FES Aragón y la Universidad La Salle , Alejandro Martínez Serrano, quien nos detalló cuáles pueden ser los ejes de la política de EU en la nueva era de Trump.
Un regreso histórico y un futuro sin tapujos
Luego de perder unas elecciones contra Joe Biden, el empresario regresó por la puerta grande a la política americana. Con el control del Senado y la Cámara de Representantes, Trump le ha dado una nueva cara al conservadurismo con esta revancha electoral.
La ideología del Partido Republicano fue una de las grandes puntas de lanza para que esto se diera, pues aunque Estados Unidos ha sido considerada la tierra de la libertad, el electorado le ha dado la espalda a temas como la legalización de drogas o la interrupción del embarazo.
— ¿Qué tan importante es esta victoria electoral para los republicanos? —
"¡De máxima importancia! Este partido (republicano) tiene la posibilidad de hacer de Estados Unidos una nación desde la visión de Donald Trump. Al ganar las elecciones, la lectura que nos deja esto es que la sociedad en general piensa en regresar a los valores de la familia y las ideas más conservadoras de la vida diaria estadunidense".
"El electorado prefirió dejar de lado las pláticas por el aborto y darle la bienvenida a un marco más ideológico y que ese mismo se aplique para resolver temas migratorios, económicos y sociales", sentenció Martínez Serrano.
Aún con el perfil de buenas costumbres que tiene el partido que abandera a Trump, es el primer criminal sentenciado por una corte americana en ganar una elección. Siendo esto una situación relevante, pues la revista Vanity Fair anunció la victoria de Trump con datos duros, misma que fue replicada en su edición española.
Martínez Serrano comentó a este medio que aún con estos escándalos, la próxima elección americana no se vería afectada por el perfil de un candidato.
"Si bien Estados Unidos ya ha tenido bastantes escándalos dentro de dentro y fuera de lo que es la vida privada de sus presidentes. Previniendo esas circunstancias, puede que tengamos candidatos futuros donde su vida personal no sea un impedimento para aparecer en una boleta”.
“Trump cometió errores en su primera administración, pero ahora con ese aprendizaje, puede que tengamos una figura presidencial que evite sus pasos anteriores. No sería sorpresa que aún con el rechazo del sector más liberal de la sociedad, se tengan candidatos que judicialmente sean objeto de críticas públicas”, sentenció el especialista.
Mirada mundial
Aunque el electorado ya habló, en enero, Trump y su equipo tienen claro que el papel de Estados Unidos no solo queda en algo local o regional, pues la política que se impulse desde éste lado del Atlántico será importante para fijar una postura de acción internacional.
Relación EU-Rusia, la OTAN y el cambio climático
—Una de las promesas de campaña fue terminar con las guerras en Europa, ¿cómo impacta la llegada del magnate al conflicto bélico que Putin sostiene con Zelensky? —
“Con la victoria de Trump no nada más pierden estas cooperaciones donde Estados Unidos se convierte en el centro del mundo, sino que también puede eliminar el financiamiento que el gobierno daba para sostener el conflicto”.
“Es importante aclarar que Trump reduce gastos donde él piense que no es importante actuar y que en el pasado tuvo una relación amistosa con el presidente Putin. Si se llegara a una solución, esta no sería nada amable para Volodomir Zelensky, ya que está perdiendo toda opción en una resolución favorable para el pueblo de Ucrania”, sentenció el internacionalista
“Dentro de esta reducción de gastos hipotética, se encuentra la OTAN. En el pasado, Trump mostró incomodidad por proteger a las naciones de Europa y sería el regreso de la exigencia americana sobre Europa para que vean por su propia defensa y no se necesite de la fuerza militar de Estados Unidos”.
"Donald Trump no cree en el cambio climático, considera que es un invento para gastar dinero en forma innecesaria".
- Guerra económica con China
—¿Tendremos acercamientos o tensiones con China de la misma forma que hubo acercamientos en Corea del Norte?—
“Cuando se habla de Donald Trump en la presidencia de un país, hablamos de alguien que tiene ideas arraigadas, negado al cambio y con agenda ya instaurada. En este caso y haciendo una leve comparación, en su primera administración, inició una guerra comercial con China que se puede intensificar si entra a la Casa Blanca con el proteccionismo americano que lo caracteriza”.
“Si dejara de lado por un momento este proteccionismo, China y EU tendrían un entendimiento donde sus líderes nacionales sepan encontrar un punto medio y favorable para los dos”, comentó a este medio.
"El ejemplo de la reunión con Corea del Norte es el que mejor encaja en esta comparativa, pues aunque no se llegó a nada, los estadunidenses ven a China como un rival comercial y en este escenario, la personalidad de Donald Trump lo asemeja mucho al héroe hollywoodense que trata de hacer 'todo correcto' acercándose al villano".
- Medio Oriente: del reconocimiento de Israel a las tensiones con Irán
La relación con países del Golfo Persa y la franja que rodea a naciones donde se han dado levantamientos árabes de trascendencia mundial son el pan de cada día en la historia estadunidense, mismos que han tenido un papel casi activo en lugares como Líbano, Irak o Israel.
Haciendo una revisión, Trump hizo algo que ante los ojos de la diplomacia no estuvo bien, ya que movió su embajada de Tel Aviv a Jerusalén. De esta forma reconoció al Estado de Israel y volcó una ola de críticas a su gobierno por mirar a otro lado ante la violencia desplegada en la Franja de Gaza.
—Trump ganó en estados donde los migrantes de origen musulmán son parte de la sociedad, ¿veremos un acercamiento a la Paz en Medio Oriente?—
“Desgraciadamente, el gobierno de Trump es uno de los aliados más grandes que tiene Benjamín Netanyahu y algo que en su administración seguirá igual es el nulo reconocimiento palestino, pues en su primera vez como presidente cambió su embajada a Jerusalén, situación que se tomó como una afrenta en el mundo árabe, pues esta ciudad es un punto declarado así por la ONU”.
“Su administración seguirá respaldando los ataques que actualmente existen y no habrá un cambio. Lo que podemos esperar de esto es que su relación con Irán decaiga a un punto donde las declaraciones que se emitan desde Washington sean cada vez más directas hacia Teherán, caso contrario con las naciones del Golfo Persa (Qatar o Arabia Saudita) donde la relación económica no ha dejado de ser constante y amable”, sentenció Martínez Serrano.
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Desde dentro: una nación ideas fuertes
Históricamente, la vida pública americana se ha encontrado dividida y hasta cierto punto plagada de discursos xenófobos, raciales o discriminatorios. En el caso de Trump, se enfrenta a una escala de la misma supremacía blanca que lo pondrá en enero en Washington.
—Con la división histórica que existe en la sociedad americana, ¿qué tanto impacto puede tener los nuevos discursos de odio que se emitan desde la Casa Blanca?—
“Todos identificamos al perfil de Donald Trump con esta cuestión de la supremacía blanca. Las cuestiones raciales puede que le afecten, pero dentro de los votos que le dieron la victoria se encuentra parte de la comunidad latina, judíos ortodoxos, mormones conservadores y el grupo más racista de la sociedad estadunidense”.
“Su victoria se traduce en un castigo para el partido demócrata, mismo que prometió una solución a estos discursos. Es obvio que los discursos antisociales convencieron a su electorado nicho, pero también hay gente descontenta con la administración demócrata”, explicó a este medio.
“Con la experiencia que ya existe de Trump frente a la Casa Blanca, podemos esperar dos cosas: que sea más mesurado (escenario que no va a pasar) o que venga recargado y es justo así como él tomará el poder; recargado, con viejas lecciones y con nuevos ‘enemigos’”.
—Estados Unidos fue de las primeras naciones que autorizó en sus leyes el voto femenino, ¿por qué vemos una segunda derrota a las aspiraciones presidenciales de las mujeres?—
“Uno de los errores que tuvieron fue escoger a alguien que representa una minoría. Bien dices, es la segunda ocasión que Donald Trump le gana a una mujer demócrata, la primera Hilary Clinton y la segunda Kamala Harris. Para los malos efectos de la política americana, aún se siente ese yugo patriarcal donde se ha preferido darle un voto de confianza a un criminal sentenciado que a una mujer libre de escrutinio legal”.
“Hace 8 años, la sociedad estadunidense le dio su voto a Trump, candidato que fue acusado de tener un pasado oscuro y si bien, el voto femenino jamás le ha favorecido, no debemos olvidar que así como existen hombres racistas y supremacistas, hay mujeres con esas ideologías que prefieren mil veces darle su confianza política a Donald Trump que a una mujer que nunca las va a representar”.
“Una de las lecciones a futuro que esto le deja al partido demócrata es que, al menos en Estados Unidos no están preparados para tener una presidenta (como aquí en México), pues el machismo de la sociedad y las ideas más conservadores apuntan a la familia tradicional donde los hombres dan seguridad y las mujeres son el pilar de la familia”.
—Con esta tendencia a esperar una posición realmente pasiva de las mujeres, ¿qué veremos de Melania Trump como primera dama?—
“Realmente, Melania es un personaje muy gris. Hace 8 años tuvo la oportunidad de hacer un cambio, pues ella también es migrante, pero no sucedió. Así que hoy en día es algo improbable que pueda pasar”.
Partido Demócrata, un burro que se debe reestructurar
La amarga victoria de Trump sobre Harris propina una de las lecciones más importantes al partido fundado por Andrew Jacksony Martin Van Buren, ya que deben pelear contra reloj con una nueva imagen que realmente atraiga al electorado estadunidense.
—Actualmente, ¿cómo queda el Partido Demócrata ante la mirada pública?—
“Se tiene que reestructurar si lo que desea es ganar una elección. Aunque puede ser poco probable que Trump compita en una cuarta ronda electoral, lo que puede ser viable es que lo haga J. D. Vance, un hombre que está alejado de los privilegios de la clase empresarial, pero que no posee un filtro y viene con ideologías más cerradas que las de Donald Trump”.
“Viendo el escenario actual y que es la segunda vez que vencen a una candidata, los demócratas deben buscar a alguien que vaya con el electorado, seguramente se inclinarán por un varón blanco y joven que los lleve a cargos públicos, pues Kamala fue víctima de una guerra sucia donde salió afectada por su imagen física vida personal y hasta su pasado fue puesto en tela de juicio”.
— ¿Cómo el patriarcado y el machismo afectó la candidatura de Kamala Harris? —
“Si bien el crecimiento de Harris fue meteórico, el hecho de que Trump señalara que Harris no tenía hijos propios, era pro aborto y se hiciera un énfasis en su ascendencia racial fue un golpe bajo que la campaña aprovechó para hablar con el sector más conservador y hacerles ver que Kamala no era viable”.
“Otro punto a resaltar fue la salud deteriorada de Biden, los numerosos enredos que su estado físico le consiguió y que fueron tomados como una burla mundial, pues nadie se burla del presidente de Estados Unidos. Biden fue obligado a dejar la contienda”.
“El voto conservador eligió a alguien que los defiende, a alguien que va con sus ideales y que tiene posturas radicales a temas donde los demócratas no quisieron meter las manos. Donald era un hombre de empresa que consiguió el sueño americano, eso tuvo un peso fundamental para los resultados del 5 de noviembre”.
—Hollywood apoyó la candidatura de Harris, pero los magnates y los deportistas fueron más allá y apoyaron a Trump, ¿realmente la cultura pop tiene peso en el electorado? —
“Sí, definitivamente en EU la cultura pop tiene un peso, pero fue esta misma que alejó a los demócratas de la Casa Blanca. Los votantes promedio de Trump no ven con buenos ojos que algo que está ligado al libertinaje llegue a puestos de poder. No importa si la respaldaron medios liberales, revistas femeninas o artistas de peso, nunca será bien visto por el ala más radical de EU que algo así llegue al poder”.
“La victoria de Trump fue asegurada en estados donde se encuentran las verdaderas industrias, los hombres de trabajo y los ciudadanos de a pie, mismos que fueron abandonados por los demócratas. Al ver que su poder adquisitivo bajó, bajó la simpatía y fueron castigados en las urnas”.
Partido Republicano: los MAGA Bros pintan de rojo a EU
Las alarmas se encienden para los dos partidos, pues del otro lado de la calle, el elefante que pintó de rojo la nación de las barras y las estrellas debe apresurar la búsqueda de un perfil similar al de Trump.
"Trump se perfila a ser uno de los presidentes más longevos de EU, para una cuarta contienda puede que J. D. Vance se presente en las boletas electorales. Vance tiene un discurso mucho más radical que el propio Donald Trump, sobre todo, porque no es producto de la clase empresarial exitosa. Es un ciudadano que se ha construido de abajo hacia arriba exacto y su ideología es de supremacía blanca, misma que se reforzará… Podríamos decir que es un Trump con 50 años menos”, sentenció el especialista.
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