Las autoridades de Alemania abrieron varias investigaciones contra empresas que aplicaban test rápidos de covid-19 y que supuestamente aumentaban el número de pruebas realizadas para conseguir el reembolso del Estado.
La fiscalía de Bochum, al noroeste del país, registró locales y viviendas privadas vinculadas con una compañía que proponía estos test de antígenos, según una portavoz citada por medios locales.
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En Lubeck, ubicada al norte, la fiscalía también abrió una investigación por fraude relacionada con la "realización y la facturación de test rápidos". Mientras que las autoridades sanitarias de Colonia visitaron un centro para realizar un control.
Desde hace varias semanas, estas pruebas son gratuitas para los habitantes, conforme a una ley federal que busca multiplicar los diagnósticos. La reglamentación prevé un reembolso de hasta 18 euros (437 pesos aproximadamente) por test, pero varios medios locales han advertido que es imposible mantener un registro acerca del número de pruebas.
Los centros no están obligados a dar los nombres de las personas sometidas al test ni otros documentos, como facturas de compra de material.
"Basta con que transmitan el número de test, sin ningún justificante, y reciben una transferencia de dinero poco después", según una investigación común de las televisiones públicas NDR y WDR, con el diario Süddeutsche Zeitung, que reveló el caso.
Para mostrar las irregularidades, los periodistas contaron las personas que fueron a hacerse el test en varios lugares y lo compararon con los datos enviados a las autoridades.
Según ellos, en un centro donde hubo un centenar de pruebas, se declararon 422 test, y en otro sitio, donde contabilizaron 550, la empresa declaró haber realizado mil 743 en un día.
ROA