El jefe del ejército israelí advirtió que la guerra contra Hamás durará "muchos meses más", al mismo tiempo que se intensifican los bombardeos en la Franja de Gaza, en un conflicto que ha dejado más de 21 mil muertos desde el 7 de octubre, según el movimiento islamista palestino, y una grave situación humanitaria.
La preocupación sobre el agravamiento de la situación humanitaria aumentó los llamados a un fin de las hostilidades, mientras los incidentes ligados a grupos respaldados por Irán, que actúan en solidaridad con Hamás, desataron temores de una conflagración regional.
Estados Unidos reportó el martes el derribo de varios drones y misiles en el mar Rojo, lanzados por rebeldes hutíes de Yemen.
Las autoridades israelíes prometen mantener su ofensiva contra el movimiento islamista Hamás.
El jefe del ejército, Herzi Halevi, afirmó en la noche del martes que "los objetivos de esta guerra son esenciales y no fáciles de alcanzar". "Por lo tanto, la guerra continuará por muchos meses más", agregó.
La guerra más sangrienta que ha vivido Gaza estalló cuando combatientes de Hamás irrumpieron el 7 de octubre en Israel, donde mataron a mil 140 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en cifras israelíes. Entre los muertos hay más de 300 militares.
En el ataque, Hamás tomó unos 250 rehenes, de los cuales 129 permanecen en Gaza, según Israel.
Israel respondió con un implacable bombardeo e invasión terrestre, una campaña que ha dejado al menos 21 mil 110 muertos, en su mayoría mujeres y niños, y 55 mil 243 heridos, según el ministerio de Salud de Gaza, controlada por Hamás.
Buscar agua
Con el asedio israelí, los 2.4 millones de habitantes de Gaza han enfrentado carencias de agua, comida, combustible y medicamentos, con escasa ayuda que ingresa al territorio.
Cerca de 1.9 millones de sus habitantes han sido desplazadas, según la ONU.
En la ciudad sureña de Rafah, donde se refugian muchos palestinos, cientos de personas llegaron el martes con baldes o botellas en carretas a la compañía de agua Abdul Salam Yassin, donde hacen fila para recibir agua potable.
El Consejo de Seguridad de la ONU pidió la semana pasada en una resolución la entrega de ayuda humanitaria con seguridad y sin obstáculos.
Pidió también nombrar un coordinador humanitario de la ONU para supervisar la ayuda a Gaza. El martes fue nombrada en ese cargo Sigrid Kaag, la ex ministra neerlandesa de Finanzas.
La resolución deja en manos israelíes la vigilancia operativa del suministro de ayuda a Gaza, donde las telecomunicaciones se estaban restableciendo el miércoles después de un nuevo corte el día anterior, según el operador palestino Paltel.
Muertes en Cisjordania
El portavoz militar israelí, Daniel Hagari, indicó el martes que las tropas "combaten en la zona de Jan Yunis y hemos expandido los combates a una zona llamada campamentos centrales".
Otros tres soldados israelíes murieron el martes, con lo que su saldo subió a 161 desde el 27 de octubre, cuando comenzó la invasión terrestre, según el ejército.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU dijo estar "seriamente preocupada por el continuo bombardeo en el centro de Gaza por las fuerzas israelíes", en especial después de que el ejército pidió a la población trasladarse a las regiones sur y central.
La situación humanitaria de Gaza fue tema de conversación el martes entre el consejero estadunidense de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y el ministro israelí de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer.
En la reunión en Washington, abordaron los pasos para mejorar la situación humanitaria en Gaza y reducir el daño sufrido por civiles, informó el funcionario estadunidense bajo condición de anonimato.
En tanto, la violencia se extendió a Cisjordania ocupada, donde una operación israelí en un campo de refugiados dejó seis muertos la mañana del miércoles, según el ministerio palestino de Salud.
Más de 300 palestinos han muerto en Cisjordania a manos de soldados o colonos israelíes desde el inicio de la guerra, según el ministerio.
Región en conflicto
Los impactos de la guerra se han extendido por Medio Oriente, donde grupos armados apoyados por Irán, enfrentado a Israel, intensificaron la actividad.
Fuerzas estadunidenses derribaron más de una decena de drones y varios misiles lanzados por rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán, contra barcos en el mar Rojo, informó el Pentágono.
Las fuerzas armadas israelíes afirmaron que uno de sus aviones interceptó "un blanco aéreo hostil" que iba rumbo al territorio israelí.
Al respecto, la televisión egipcia Al-Qahera News informó de un aparato volador que fue alcanzado a dos kilómetros de la localidad costera de Dahab, unos 125 km al sur de Eilat, en el extremo sur de Israel, el punto más cercano para un ataque desde Yemen.
El ejército israelí informó el miércoles que atacó por la noche una instalación militar de Hezbolá en el Líbano e interceptó varios cohetes disparados desde ese país después de que sonaran sirenas de alerta en el kibutz Rosh Hanikra, en el norte de Israel.
Las fuerzas estadunidenses también atacaron grupos proiraníes en Irak, a los que culpó de varios ataques contra sus tropas y aliados.
En tanto, un misil antitanques disparado por el movimiento libanés Hezbolá hirió a nueve soldados, según el ejército israelí, mientras dos combatientes del movimiento apoyado por Irán murieron en enfrentamientos, según ese grupo.
SNGZ