Argentina entra en nuevo confinamiento estricto ante alza de casos de covid-19

El gobierno de Alberto Fernández, en conjunto con el de Buenos Aires, ordenó la mayor limitación de circulación tras registrar en últimos días más de 30 mil nuevos casos de covid-19.

Las restricciones en Buenos Aires se mantendrán por al menos 9 días. (AFP)
Editorial Milenio
Buenos Aires /

Argentina inició este sábado un confinamiento total y estricto de nueve días, por el que se suspende todo tipo de actividad no esencial en las zonas del país de alto riesgo por la segunda ola de covid-19, que está dejando récord de contagios y muertes, así como elevando la tensión en la ocupación hospitalaria. 

El gobierno de Alberto Fernández ha establecido que las personas deben permanecer en sus residencias habituales y solo podrán circular en las cercanías de su domicilio, entre las 6:00 de la mañana y las 18:00 horas, o por razones especialmente autorizadas, en las zonas del país en "alto riesgo" y "alarma" sanitaria.

El confinamiento fue acordado tanto por el gobierno de Alberto Fernández, como del alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. (AFP)

También suspendieron las actividades sociales, económicas, educativas, religiosas y deportivas en forma presencial, entre ellos partidos de la Liga Argentina de Futbol.

Solo se habilitaron los comercios esenciales como la venta de alimentos, medicamentos y artículos de limpieza; en cambio  determinó que los comercios no esenciales solo podrán operar mediante la entrega a domicilio o para llevar.

"La medida es transitoria", dijo la ministra de Salud, Carla Vizzotti, a Radio 10, quien viajará a México la próxima semana, y señaló que se evaluará la situación después de estos nueve días y se tomarán "medidas intermitentes" en caso de ser necesario.

Las medidas también tuvieron aprobadas por el oficialista gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. (EFE)

Accesos en Argentina, casi restringidos

Desde la medianoche del sábado, comenzaron los controles estrictos en accesos y en rutas, dificultados por las lluvias, se han cerrado 71 accesos a la capital del país, para dejar abiertos otros 56 con controles, y en las estaciones de ferrocarril, de metro y terminales de ómnibus.

A partir de este sábado se ha cerrado el turismo y los cruces interjurisdiccionales, en tanto se advirtió que el transporte de larga distancia sólo podrá ser usado por trabajadores esenciales.

En tanto, se prorrogó hasta el 11 de junio el cierre de fronteras para el turismo, así como la suspensión de los vuelos que tengan como origen y destino el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y como origen Chile, Brasil, México e India.

Diversas paradas del Subte, el metro de Buenos Aires, y de las rutas de autobuses fueron suspendidas para limitar la circulación. (EFE)

Casi 40 mil nuevos casos diarios en Argentina

Las restricciones que comenzaron este sábado profundizan las que el gobierno de Fernández había implementado desde el 9 de abril pasado, particularmente en Buenos Aires y su periferia, debido a que los casos siguieron en aumento y experimentaron un fuerte crecimiento en el interior del país.

Cuarentena en día feriado y con ciclón

El inicio del confinamiento estricto se realizó en medio del día feriado de la Revolución de Mayo de 1810, que es tradicionalmente en 25 de mayo. Donde se conmemora la constitución de un primer gobierno dentro del proceso de independencia nacional, que culminaría el 9 de julio de 1816.

A su vez, se registra un ciclón frente a las costas de la provincia de Buenos Aires, donde se ha reportado vientos superiores a los 80 km /h y fueres lluvias en la región bonaerense.

Argentina atraviesa una segunda ola de contagios de covid-19 -que esta semana alcanzó un récord diario de 39 mil 652 contagios, el miércoles, y 745 muertes, el martes, por lo que acumula, desde el inicio de la pandemia, 3 millones 482 mil 512 millones de positivos y 73 mil 391 decesos.

Los partido de la Liga Argentina fueron suspendidos; pero algunos de la Copa Libertadores se mantuvieron. (EFE)

Ese vertiginoso aumento de los casos puso en tensión al sistema de salud, con una ocupación de unidades de terapia intensiva por todo tipo de patologías del 73.1 por ciento a nivel nacional, pero del 76.4 por ciento si solo se considera Buenos Aires y su populosa periferia.

"Hay ciudades y provincias que tienen hoy su sistema de salud al límite. El problema ya no se acota a determinado territorio. Es muy grave y se evidencia en todo el país", advirtió el jueves pasado el presidente Fernández.

En medio de estas restricciones, el gobierno espera la llegada de nuevas vacunas, porque el país con una población de unos 45 millones de habitantes, hasta ahora ha aplicado unas 10.9 millones de dosis, aunque sólo 2.3 millones de personas han sido inoculadas con dos dosis.

Sólo los negocios esenciales podrán estar abiertos; clases están completamente suspendidas. (AFP)

Clases suspendidas y una crisis económica pronunciada

El gobierno de Fernández amplió la asistencia del Estado para proteger a sectores vulnerables y a comercios y empresas afectados por las restricciones que se están aplicando y que recuerdan la larga cuarentena que el año pasado hizo que la economía cayera 9.9 por ciento y la pobreza ascendiera al 42 por ciento de la población.

En tanto, el alcalde de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, sorprendió al suspender las clases presenciales y virtuales de los tres días hábiles de la próxima semana para recuperarlas en diciembre próximo, a la espera de nuevas vacunas.

Garantizar o no las clases presenciales ante el aumento de contagios sigue siendo parte de una disputa pública entre el peronista Fernández y el opositor Rodríguez Larreta, que llegó a la Justicia, así como en el seno de la sociedad.

Pese al avance de la vacunación, los casos se siguen concentrando principalmente en la zona de Buenos Aires. (AFP)

dmr

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