Un grupo de ancianos cubanos, incluyendo varios octogenarios, han comenzado a nadar de nuevo en las costas de La Habana luego de casi dos años sin lanzarse al mar debido a la pandemia de coronavirus y las restricciones que complicaron el ejercicio fuera del hogar.
Cuba fue duramente afectada por un brote del virus en 2021, que llevó a las autoridades de salud a implementar restricciones en todo el país y severas medidas de movimiento. Pero una exitosa campaña de vacunación ha permitido comenzar a volver a la normalidad para muchos.
Los veteranos nadadores, ataviados con trajes de baño brillantes y ajustados, dijeron a Reuters que la flexibilidad de las restricciones les había otorgado una nueva oportunidad de vida.
"Cumplí 80 años el 25 de diciembre. Y dos años fuera de la natación me representaron cosas muy feas para mi (...) pero he empezado a nadar de nuevo y estoy feliz por lo que representa para mi salud, y para mi mente también", dijo el habanero Fernando Sergio Paneque.
Los miembros del club de natación "masters" se reúnen temprano en la mañana cuando sale el sol, nadan en áreas poco profundas y protegidas en la costa norte de La Habana.
"Es muy bonito encontrarte con gente de esta edad, que tenga ese entusiasmo, esa vitalidad (...). Muchos de ellos están superando enfermedades con esta práctica del deporte", dijo por su parte Tania Coffigny, vicepresidenta de la Federación Cubana de Natación para "Masters".
Sumergirse en las tranquilas aguas color turquesa ha ayudado a revivir a muchas personas deprimidas tras meses de aislamiento, dijo a Reuters el miembro del club Orestes Quintana. "La pandemia nos afectó porque los clubes de natación y las playas permanecían cerradas", relató.
Quintana, sin embargo, señaló que él y otros nadadores han encontrado formas de hacer frente a la enfermedad a pesar de las restricciones. "Siempre había algunos lugares donde uno podía nadar en secreto", añadió sonriendo.
dmr