Estados Unidos busca un “pretexto” para agravar la situación en el golfo Pérsico y llevar el conflicto con Irán a “una fase más activa” con una “confrontación militar a gran escala”, afirmó ayer el Ministerio de Exteriores de Rusia.
“Hay la impresión de que Washington simplemente busca un pretexto para caldear la situación (en el golfo Pérsico) y continuar la retórica agresiva contra Irán para llevar el conflicto a una fase más activa, caliente”, aseguró la portavoz de Exteriores ruso, María Zajárova, en rueda de prensa.
Según Zajárova, el potencial de conflicto en el Pérsico “ha aumentado” y amenaza con “un enfrentamiento militar a gran escala”.
Además, criticó la propuesta del gobierno de Donald Trump de crear una coalición para patrullar el golfo Pérsico y aseguró que el objetivo de la “así llamada coalición sería presionar militarmente a Irán más que garantizar la paz” en la zona.
En este sentido, subrayó que antes de la salida unilateral de EU del acuerdo nuclear firmado entre Irán y seis grandes potencias en 2015 el tráfico marítimo por el estrecho de Ormuz discurría “de forma estable y tranquila”.
El golfo Pérsico ha sido escenario desde mayo pasado de numerosos incidentes, incluidos ataques contra petroleros y buques cisterna, de los que EU ha responsabilizado a Irán, después de que este país amenazara con bloquear el estrecho de Ormuz si las sanciones estadunidenses impiden sus exportaciones de crudo.
La semana pasada Rusia, uno de los principales aliados de Irán, propuso crear un mecanismo de seguridad colectiva en el golfo Pérsico a fin de estabilizar la situación en la región.
Ese sistema, según Moscú, debe respetar los intereses de todos los países del golfo Pérsico tanto en materia de seguridad, como en los campos militar, económico y energético, por lo que es inaceptable marginar a alguno de los estados de la región.
A su vez, Washington llamó previamente a formar una coalición internacional para proteger la navegación en el Ormuz, propuesta que ha sido rechazada tajantemente por Teherán.
El temor a una guerra en Oriente Medio con repercusiones a nivel mundial ha subido desde que EU abandonó el acuerdo nuclear.
La república islámica respondió con la reanudación de su programa de enriquecimiento de uranio, considerado por Occidente como una vía potencial para el desarrollo de bombas atómicas. Irán niega tener esta intención.
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NORCOREA LANZA OTRA VEZ MISILES
Corea del Norte realizó su tercera prueba de misiles en ocho días pero el presidente de EU, Donald Trump, no le dio gran importancia.
Los norcoreanos, que tienen armas nucleares, están impedidos por la ONU de realizar pruebas de misiles balísticos.
“No tengo ningún problema, veremos qué sucede, pero los misiles de corto alcance son muy estándar”, justificó Trump.