Efectivos de las fuerzas de seguridad de Rusia entraron en un centro de detención preventiva en el sur del país y mataron a reclusos acusados de estar ligados a células terroristas islámicas que habían tomado a dos trabajadores como rehenes.
Reporteros presentes en la zona dijeron que se escucharon disparos y, en imágenes publicadas en redes sociales, se veía varias ambulancias llegando al penal.
Los rehenes del centro de detención preventiva de Rostov del Don salieron ilesos, de acuerdo con un comunicado del Servicio Penitenciario Federal ruso.
Los presuntos secuestradores fueron “liquidados”, añadió la nota, que no ofreció más detalles.
Así irrumpieron los militares:
Varios medios locales, incluyendo RT, afirmaron que al menos uno de los prisioneros habría fallecido.
Antes en el día, la agencia noticiosa estatal rusa Tass dijo, citando fuentes no identificadas de las fuerzas de seguridad, que en el patio central del Centro de Detención Nº1 de la región de Rostov había seis presuntos secuestradores que iban armados con una navaja, una porra de goma y un hacha contra incendios. Entre los presos había hombres acusados de estar vinculados al grupo extremista Estado Islámico, agregó.
Imágenes publicadas en las redes sociales mostraban al menos a dos de los secuestradores con una cinta en la cabeza que se asemejaba a la bandera de la milicia radical. Otras imágenes mostraban a los reos empuñando cuchillos.
Presuntos secuestradores:
Según RT, tres de los implicados habían sido condenados por cargos de terrorismo, incluyendo difusión de información extremista y conspiración para atentar contra un tribunal ruso.
En los últimos años, Estado Islámico ha llevado a cabo una serie de ataques en territorio ruso. Una filial del grupo se atribuyó el más reciente, en marzo, cuando hombres armados abrieron fuego en una sala de conciertos en un suburbio de la capital, Moscú, y mataron a 145 personas.
SNGZ