Gracias a información proporcionada por medios locales, se dio a conocer la impactante historia de una mujer, que con ayuda de 50 píldoras molidas al interior de un postre, fue como envenenó a su pareja, ocasionando su muerte, y así vender sus bienes para pagar una elevada deuda.
Así fue como los medios y la policía de Río de Janeiro, Brasil dieron a conocer la trágica muerte del empresario, Luiz Marcelo Antonio Ormond (45), quien fue visto por última vez junto a su pareja, en el ascensor de su departamento, antes de que fuera envenenado gracias a un postre relleno de droga.
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Un dulce veneno
La última vez que se le vio con vida al empresario fue en un video de cámara de seguridad dentro del ascensor de su departamento, en el corto metraje se ve entrando a Luiz Marcelo y a su entonces novia, Júlia Andrade Cathermol Pimenta, quien es la principal sospechosa de la Policía Civil de Río de Janeiro.
En dicho metraje se puede observar cómo la pareja entra al ascensor, se dan un beso, y continúan su plática, sin embargo, un detalle que resaltaron los peritos fue el plato que llevaba en la mano Marcelo, un brigadeirao, un postre típico de chocolate, el cual se presume Júlia envenenó con más de 50 pastillas molidas.
Para el lunes 20 de mayo, los vecinos del departamento en el barrio Engenho Novo, Zona Norte de Río de Janeiro, Brasil, llamaron al cuerpo de bomberos debido a un fétido olor que provenía de uno de los pisos superiores. Al llegar al apartamento con el pútrido olor, fue que las autoridades se percataron de la muerte de Marcelo.
Días antes de que acudiera el cuerpo de bomberos para atender el mal olor proveniente del apartamento, se puede ver en las mismas cámaras de seguridad cómo Júlia (29) sale del edificio con una maleta de ruedas y un gran bolso. La policía señala que el asesinato del empresario se debe a una deuda muy elevada que tiene la mujer.
Una deuda qué pagar
Con maletas en mano y manejando el coche de Marcelino -como sus familiares le decían de cariño al empresario- fue como se vio por última vez a Júlia, quien actualmente está prófuga de la justicia por supuestamente haber envenenado al empresario.
El 28 de mayo, las autoridades brasileñas detuvieron a una gitana, identificada como Suyany Breschak, quien admitió ante la Policía Civil haber sido participe y ayudado a Júlia a planear la muerte de su novio, así como ayudarle a vender sus pertenencias para así pagarle por sus servicios.
Aparentemente Suyany confesó que Júlia habría acudido a ella y a sus servicios para que sus parejas futuras no se enteraran de su pasado, pues Júlia ejercía la prostitución antes de haber conocido a Luiz Marcelo. Ante su preocupación por que se enteraran de su pasado, decidió ir con la gitana, pero salió más caro de lo pensaba, pues le terminó debiendo más de 115 mil dólares.
La prima del empresario dijo que la madre de Luiz Marcelo estaba en contra de la relación y que Júlia había aprovechado su muerte para acercarse a la víctima. La familiar cree que intentaba establecer una unión estable con el empresario para acceder a su patrimonio.
ROG