El papa Francisco confirmó la suspensión del ejercicio sacerdotal del cardenal George Pell, quien fue declarado culpable de delitos sexuales contra menores de edad en Australia.
El Papa ha tomado “medidas de precaución”contra Pell, incluyendo una prohibición para celebrar música en público y “como es norma, los contactos de cualquier tipo o forma con menores”, dijo el portavoz Alessandro Gisotti.
En la primera respuesta del Vaticano a la condena, Gisotti dijo a reporteros que esto es "doloroso" para muchos, pero el cardenal ha proclamado su inocencia y tiene el derecho a "defenderse hasta el último nivel" del proceso judicial.
"Es una noticia dolorosa que, somos conscientes de ello, escandalizó a muchas personas, no solo en Australia. Como ya hicimos otras veces, reafirmamos nuestro profundo respeto por las autoridades judiciales australianas", anunció.
Gisotti añadió que se unen a los obispos australianos en la oración por las víctimas de abusos, reiterando "su compromiso con hacer todo lo posible hasta que la Iglesia sea una casa segura para todos, en especial para los niños y los más vulnerables".
El jurado declaró al religioso culpable de haber abusado de dos niños de 13 años a quienes encontró bebiendo vino sacramental en un cuarto trasero de la Catedral de San Patricio en Melbourne a fines de 1996, cuando él tenía 55 años, mientras cientos de fieles salían de la iglesia tras los servicios dominicales. También se declaró culpable a Pell de haber abusado de uno de los muchachos en un pasillo más de un mes después.
El cardenal, que ahora tiene 77 años, se enfrenta una condena de hasta 50 años en prisión en la audiencia para la sentencia que arranca el miércoles. La semana pasada presentó una apelación a las condenas.
jos