El rey Carlos III de Inglaterra fue dado de alta de un hospital de Londres el lunes, después de una estancia de tres noches para someterse a un tratamiento por agrandamiento de la próstata, según reportaron cadenas de televisión.
El rey, de 75 años, que ingresó el viernes para un procedimiento programado, saludó a la multitud mientras se dirigía a casa desde la Clínica de Londres acompañado por su esposa, la reina Camila.
Su hospitalización se produjo horas después de que su nuera, Kate, la Princesa de Gales, también abandonara el mismo hospital luego de dos semanas de recuperación de una cirugía abdominal.
El Palacio de Buckingham informó en un comunicado de que Carlos, que fue visitado en el hospital por Camila cada día de su estancia, quiso dar las gracias a su equipo médico y a todos los que habían lo habían apoyado durante su hospitalización.
"El rey ha sido dado de alta esta tarde del hospital tras el tratamiento médico previsto y ha reprogramado próximos compromisos públicos para permitir un periodo de recuperación privada", dijo el Palacio de Buckingham.
Catalina, de 42 años y esposa del heredero al trono británico, el príncipe Guillermo, "evoluciona favorablemente", según su oficina en el palacio de Kensington, y ya se encuentra de vuelta en su casa de Windsor.
A principios de enero fue operada de una afección no especificada, pero no cancerosa.
Los miembros de la realeza británica suelen considerar todos los asuntos médicos un asunto privado, pero Carlos decidió hacer pública su enfermedad para animar a otros hombres a someterse a revisiones médicas.
Catalina no volverá a la actividad pública hasta después de Semana Santa. El príncipe Guillermo ha pospuesto sus compromisos para cuidar de sus tres hijos.
SNGZ