El movimiento libanés proiraní Hezbolá no debe tomar la "decisión equivocada" de abrir un segundo frente de ataque contra Israel, tras el la operación del movimiento Hamás, advirtió un alto cargo de defensa estadunidense.
"Estamos profundamente preocupados de que Hezbolá tome una decisión equivocada y opte por abrir un segundo frente en este conflicto", que comenzó el sábado con un ataque masivo lanzado por Hamás desde la Franja de Gaza, dijo el funcionario a los periodistas.
La orden de desplegar el grupo aeronaval del portaaviones "USS Gerald Ford", el buque de guerra más grande del mundo, en el Mediterráneo oriental muestra a los grupos armados apoyados por Irán, como el Hezbolá libanés, que no deberían "dudar del compromiso de Estados Unidos de apoyar la defensa de Israel", aseguró la fuente.
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Hezbolá anunció que tres de sus combatientes murieron al ser alcanzados por ataques israelíes en una zona fronteriza en el sur del Líbano; por su parte, el grupo libanés afirmó haber bombardeado, en represalia, dos cuarteles del ejército de Israel.
Israel bombardeó esa zona tras anunciar que había matado a "varios sospechosos armados" que se infiltraron en su territorio desde el sur del Líbano.
Estas infiltraciones fueron reivindicadas por la Yihad Islámica palestina, que afirma respaldar a Hamás en su ofensiva.
Más de 800 personas han muerto en el lado israelí y 687 en la Franja de Gaza desde el ataque de Hamás el sábado, según fuentes oficiales.
En Washington, el funcionario estadounidense consideró que los ataques de Hamás están "al mismo nivel de barbarie" que los del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
La última guerra entre Hezbolá e Israel se remonta a 2006 y dejó más de mil 200 muertos del lado libanés, en su mayoría civiles, y 160 del israelí, casi todos militares.
aag