El gigantesco baldaquino de bronce situado en el centro de la Basílica de San Pedro será sometido a su primera gran restauración en más de 260 años, con el objetivo de devolverle su brillo a tiempo para las celebraciones del Año Santo en 2025, anunció el jueves el Vaticano.
Los expertos gastarán 700 mil euros (unos 13 millones 200 mil pesos mexicanos) en limpiar y reparar el Baldaquino de San Pedro, construido en el siglo XVII por un equipo dirigido por el célebre escultor y arquitecto barroco Gian Lorenzo Bernini.
El baldaquino, de casi 30 metros de altura, cubre el altar mayor de la basílica y se construyó en el lugar donde se cree que fue enterrado San Pedro, el primer papa, tras morir como mártir cristiano bajo el reinado del emperador romano Nerón (54-68 d.C.).
"Nos enfrentamos a un gigante y, por tanto, todo lo que hagamos será una empresa titánica", declaró sobre la restauración Pietro Zander, jefe de la unidad de patrimonio artístico de la Fabbrica di San Pietro, departamento encargado de la basílica.
Zander dijo que la estructura se encuentra en un "estado de conservación degradado", con sus decoraciones doradas oscurecidas por una pesada pátina causada por el polvo y las partículas, y la pintura desprendiéndose de sus partes de madera. Su última gran restauración data de 1758, añadió.
Alberto Capitanucci, otro experto de la Fabbrica di San Pietro, afirmó que las obras no interferirán con los servicios religiosos, lo que permitirá al papa Francisco seguir celebrando misa desde el altar mayor.
Dijo que la restauración (financiada por los Caballeros de Colón, una organización benéfica católica) debería durar unos 10 meses, por lo que el baldaquino tendrá "un nuevo esplendor" cuando Francisco inaugure el Año Santo 2025.
El Año Santo, también conocido como Jubileo y que se celebra en Roma al menos cada 25 años, comienza en la Nochebuena de 2024 con la apertura de la Puerta Santa de la basílica. El acontecimiento suele atraer a millones de peregrinos que buscan la remisión de sus pecados.
SNGZ