Activos digitales 'se suben al ring' con las leyendas de la lucha libre

La lucha libre forma parte de la cultura mexicana y el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) es de las principales empresas que representan esta tradición, pero como toda organización debe evolucionar y buscar nuevas fuentes de ingreso, por eso decidieron apostar por los activos digitales o tokens no fungibles, mejor conocidos como NFT (por su sigla en inglés).

Estos artículos digitales de colección se convirtieron en una de las herramientas más usadas por diversas organizaciones deportivas y culturales para obtener más dinero; tan sólo en 2021 este negocio representó alrededor de 13 mil 981 millones de dólares a escala mundial, muy superior a los 66.8 millones que valía en 2020, según cifras del portal de estadísticas Statista.

De esta cantidad, 51 por ciento representan NFT coleccionables, mientras que juegos y obras de arte representan 15 por ciento cada uno.

Cifras preliminares de Scientific Reports indican que entre junio de 2017 y abril de 2021 se realizaron 6.1 millones de transacciones de 4.7 millones de NFT, obtenidos principalmente de las cadenas de bloques Ethereum y WAX.

En el caso de la CMLL, estrellas como Místico, Dalys La Caribeña y KeMonito son algunos personajes que ya forman parte del primer lote de figuras de la lucha mexicana que tienen presencia en mundo digital, en el cual los usuarios pueden hacerse de una “postal” con las mejores acrobacias que estos atletas.

Para Dalys la Caribeña, el nuevo proyecto que inició operaciones de manera formal en octubre de 2021, representa una nueva forma de elevar su carrera profesional a mercados donde no tenía presencia, además de ser una alternativa de obtener más ingresos.

En entrevista con MILENIO, Dalys la Caribeña comentó que “se van a abrir yo creo que muchas puertas, va a ser una manera en que por medio de esta plataforma nos conozcan también en otros lugares del mundo en los que no podemos llegar con la televisión, pero por este sistema claro hay y va a haber mucha oportunidad para abrirse y expandirse sobre todo el deporte de la lucha libre”.

“Estoy abierta a este nuevo sistema de trabajo, porque es una fuente de trabajo que va a beneficiarnos a nosotros como atletas”, indicó la luchadora.

Alexis Salazar López, comunity manager del CMLL, explicó que gracias al auge que tienen hoy en día los NFT, la empresa en alianza con la firma especializada en la materia SeroUno Group, mantiene sus deseos de darse a conocer en mercados en los que no tiene presencia.

“Estamos prácticamente en los primeros pasos con cinco luchadores, cinco luchadores con lo que queremos representar es justamente sus movimientos, la espectacularidad de la lucha libre mexicana que eso siempre es un imán”, explicó Salazar López sin detallar cifras.

Con el primer lote de cinco luchadores que muestran las acrobacias de cada uno de ellos, el CMLL en su misma página de internet comercializa las postales más emblemáticas de sus luchadores; los cuales tienen un costo distinto dependiendo del número de copias disponibles de cada uno de ellos.

En la página del CMLL, las postales de la Amazona Dalys llave Patadas voladoras y del Místico la llave Spanish Fly tienen un costo de flow 2.00 cada una (un flow equivale a 7 dólares).

Adelantó que será en el primer trimestre de este año cuando el CMLL lance al mercado un segundo lote de NFT, en los cuales los principales exponentes serán las máscaras de los distintos luchadores, esto gracias a la enorme popularidad que tienen los atuendos de los atletas desde hace muchos años.

¿Qué son los NFT?

El token no fungible es un activo digital único en su especie, irrepetible, con un número muy limitado de copias y no disponible de forma física, el cual gracias a la tecnología blockchain se puede soportar y almacenar, además de que se pueda verificar su autenticidad y originalidad como elemento digital comerciable.

Los NFT son comercializados a través de internet, codificados a través de contratos inteligentes en una cadena de bloques (blockchain); para adquirirlos necesitas tener criptomonedas.

Hace un par de semanas se reveló que la tenista Serena Williams se integró a la junta directiva de la empresa Fantasy Sorare, plataforma tecnológica que reúne NFT de atletas internacionales, activos que sirven para gestionar equipos, ganar premios y generar ganancias a todos aquellos compradores.

Williams es parte de una tendencia en el cual otros atletas de alto rendimiento como Rafa Nadal, Cristiano Ronaldo y Gerard Piqué ya incursionan en este mundo digital, en el cual el mercado mexicano no está exento.

En la primera división del fútbol soccer nacional, los clubes deportivos del Necaxa y los Pumas de la UNAM también tienen fichados a varios atletas como un activo digital rentable. En el sector farmacéutico, la cadena de Farmacias Similares anunció en días pasados la comercialización de tres imágenes del Dr. Simi en NFT.

Debido a la naturaleza, originalidad y valor en el mercado, cada token tiene un costo distinto, por lo anterior se estima que sólo 1 por ciento de los NFT se comercializó por más de mil 500 dólares, mientras que 75 por ciento se vendió por menos de 15 dólares durante el último año.

Derechos de autor se conservan

A pesar de que en la actualidad el mercado digital cuenta con miles de tokens digitales de toda clase de productos, marcas, servicios y personajes célebres; esto no significa que los usuarios finales ahora tengan los derechos y autorías de cada unos de los NFTs que se adquieren; pues aún al realizar la compra de un bien, estos conservan su propiedad intelectual, aseguró Sergio Legorreta, socio del despacho Dentons López Velarde.

“El NFT es una firma digital que da certeza respecto a la existencia de un bien, pero nada más (…) Cualquier derecho que se dé tiene que ser otorgado de forma expresa, y no necesariamente por el hecho que un token o un NFT esté relacionado con el bien automáticamente se otorgan derechos”, explicó.

Entrevistado por MILENIO, el especialista en la materia afirmó que aún con el creciente incremento en la compra de estos nuevos activos digitales las empresas y las marcas no ceden sus derechos de propiedad intelectual, por lo que hasta ahora no existe algún caso que afirme lo contrario, pues al adquirir estas postales digitales los usuarios obtienen una copia digital certificada más no una cesión de derechos.

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