La carencia de un mayor despliegue de infraestructura, modelos de negocios inmaduros y una explotación completa de tecnologías de cuarta generación, son algunas de las características por las cuales América Latina no esta preparada para la red 5G, aseguró Horacio Romanelli, director de Asuntos Regulatorios del operador móvil Millicom.
“Hay que lidiar con las cargas ineficientes del sector: tenemos muchas cargas regulatorias, precios altos de espectro, regulaciones obsoletas; todo eso encarece el servicio, dificulta operar y genera problemas que el inversionista no termina de entender”, planteo el Romanelli.
Al participar en el Congreso Latinoamericano de Transformación Digital 2021, lamentó que desde el gobierno no existan las condiciones para que empresas del sector, como Millicom, puedan desplegar servicios de telefonía, internet, banda ancha, conectividad y mayor infraestructura.
Con lo anterior, los Estados reducen el flujo de dinero disponible para que se pueda seguir invirtiendo, debido a que las empresas deben replantear sus proyectos de negocio a mediano y largo plazo, para poder inyectar mayores recursos al mercado y a la par poder pagar todas las regulaciones que se les imponen.
En este sentido, recordó que, en el sector de las telecomunicaciones, 75 por ciento de las inversiones provienen de la iniciativa privada, contrario a lo que sucede como en industrias como la energía o salud.
En lo que respecta a las tecnologías de 4G, Romanelli afirmó que el despliegue de estos servicios aún no se ha explotado en su totalidad en toda la región; por lo que aún existen elementos suficientes para generar casos de negocios con 4G y 4.5G.
“Latinoamérica está atrasada en conectividad y debemos trabajar en corregir la brecha existente, para estar preparados para afrontar las nuevas tecnologías que 5G que van a venir”, menciono el directivo.
Brecha de apropiación
El uso del internet en México no sólo debe utilizarse para el envío y recepción de mensajes instantáneos o para visualizar videos, debe ser aprovechado para el desarrollo económicos y social, señaló Javier Juárez Mojica, comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
“No impulsar la transformación digital es sinónimo de no impulsar la competitividad del país, y de no fomentar una mejora en la calidad de vida de las personas”, sostuvo el comisionado al participar en el Congreso Latinoamericano de Transformación Digital 2021.
Argumentó que, durante la administración pasada la reforma en telecomunicaciones logró un impacto favorable del 6 por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB) Nacional; gracias a la apertura que tuvo el mercado.
De igual manera, si las líneas de telefonía móvil por cada 100 habitantes aumentan 1 por ciento, 0.28 por ciento de la población saldría de una situación de pobreza, añadió el comisionado del IFT.
En el ámbito educativo, si el porcentaje de escuelas primarias que cuentan con internet respecto al total de primarias que cuentan con al menos una computadora aumenta en una unidad porcentual, el porcentaje promedio del logro del examen de lenguaje y comunicación aumentaría 2 por ciento en alumnos que cursan el sexto grado.
Con todo lo anterior, Juárez Mojica señaló que, en la actualidad, gran parte de la población con acceso a internet utiliza estos servicios “básicos e ilimitados”, por lo que el reto será romper la llamada “brecha de apropiación”.
En este sentido, el comisionado del IFT mencionó que las redes actuales, e incluso las de quinta generación, deberán explotarse en sectores como los bancarios, educativos, agricultura o cultural vial, por mencionar algunos.
AMP