De enero a mayo la utilidad de los bancos que operan en México aumentó 26.7 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2020, reportó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
El resultado neto acumulado del sector a mayo de 2021 fue de 65 mil millones de pesos. Según las cifras de la CNBV, las ganancias lograron una variación porcentual positiva por tercer mes consecutivo, con respecto al mismo periodo del año pasado, en un momento en que las instituciones financieras crearon menores reservas para riesgos de crédito.
En este sentido, el saldo de las estimaciones preventivas para riesgos crediticios alcanzó un monto de 201 mil millones de pesos, lo que representó una disminución de 8.7 por ciento, con respecto al mismo lapso del año pasado, impactado por la pandemia de covid-19.
La CNBV indicó que la cartera de crédito vigente de la banca múltiple, es decir, el sistema bancario mexicano, alcanzó un saldo de 5.1 billones de pesos al cierre de mayo de 2021, con una disminución anual real de 12.4 por ciento respecto al mismo mes de 2020.
En el desagregado, los resultados del regulador muestran que los préstamos que son otorgados a las familias mexicanas continúa a la baja, el saldo vigente de los créditos al consumo se colocó en 945 mil millones de pesos, reducción de 10 por ciento en el periodo de referencia.
En el crédito otorgado a través de tarjetas, el portafolio disminuyó 8.7 por ciento con un saldo de 350 mil millones de pesos; en los préstamos personales, la reducción fue de 22.4 por ciento con un monto de 157 mil millones y en los financiamientos que son otorgados por medio de la nómina la caída fue de 5.4 por ciento con una cantidad de 254 mil millones de pesos.
La cartera empresarial registró un saldo de 2.4 billones de pesos, con un descenso anual de 19.4 por ciento en términos reales. Dicha cartera explicó el 76.5 por ciento del crédito comercial vigente. En esta disminución, dijo, contribuyeron dos eventos que se observaron el año anterior, los cuales hicieron crecer transitoriamente los saldos de cartera al inicio del periodo de confinamiento relacionado con la pandemia de covid-19.
En tanto, la morosidad con respecto al portafolio total de crédito se situó en 2.52 por ciento, lo que implicó un incremento anual de 0.11 puntos porcentuales (pp). Sin embargo, en el segmento de consumo se colocó en 4.25 por ciento, lo que representó una baja de 0.61 pp.
En las tarjetas de créditos, el índice de impago fue de 5.04 por ciento y cayó 0.73 pp; en los créditos personales se situó en 6.31 por ciento y se redujo 1.23 pp; mientras que en los financiamientos de nómina el índice fue de 2.61 por ciento y bajó 0.24 pp.
MRA