Después de varios meses manteniendo la tasa de referencia en 11.25 por ciento, el Banco de México (Banxico) decidió por primera vez en tres años un recorte de 25 puntos base dando inicio al ciclo de ajustes a la baja.
La Junta de Gobierno de la entidad dijo que evaluó la mitigación de los efectos de los choques sobre la inflación y sus determinantes, así como el comportamiento de las expectativas de mediano y largo plazo y el proceso de formación de precios.
Reconoció el proceso desinflacionario desde la última vez que se ajustó la tasa de referencia; no obstante, consideró que persisten retos y riesgos que ameritan continuar con un manejo prudente de la política monetaria. Por lo anterior y con la presencia de todos sus miembros, la Junta de Gobierno del Banxico, decidió por mayoría, reducir la tasa de interés interbancaria.
“Con esta decisión, la postura monetaria se mantiene restrictiva y continuará siendo conducente a la convergencia de la inflación a la meta de 3 por ciento en el horizonte de pronóstico”, comentó en un comunicado.
Destacó que seguirá vigilando estrechamente las nuevas presiones inflacionarias, así como factores que inciden en trayectoria prevista para lo que afecta la decisión de precios y en expectativas. Dicen que en las siguientes reuniones se tomarán nuevas decisiones en función de la información disponible.
“El banco central mexicano reafirma su compromiso con su mandato prioritario y la necesidad de perseverar en sus esfuerzos por consolidar un entorno de inflación baja y estable”, detalló.
Por su lado, Banco BASE publicó en sus redes sociales que una menor tasa de interés implica menor costo del dinero en México. En este contexto, los créditos con nivel variable bajarán su tasa de interés, mientras que los créditos a tasa fija se mantiene sobre lo establecido en los contratos de cada cliente con su institución financiera u órgano crediticio.
Por otro lado, los nuevos créditos tendrán una tasa de interés menor, lo cual incentiva el crecimiento del consumo y la inversión fija.
Contracorriente
La decisión de política monetaria de Banxico va en contra de lo estipulado por la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que anunció que mantendría su tasa de referencia entre 5.25 y 5.50 por ciento.
Al respecto, Jessica Roldán, economista jefa de la firma financiera Finamex, señaló que aunque la Fed es un determinante importante de las acciones de Banxico, en este momento la postura monetaria en México es sumamente restrictiva.
“Sí hay un avance en la inflación, sobre todo en inflación subyacente, a partir de, o sea, durante una parte importante de 2023”, comentó en entrevista para MILENIO.
Mientras que Alejandro Javier Saldaña Brito, economista jefe del banco Ve por más, expuso que la decisión de Banxico es “fina”, pues aún hay mucho por considerar en riesgo.
“Prevemos que la inflación ceda algo más, sujeto a que se modere el crecimiento económico, aun reconociendo la renuencia a bajar en unos componentes (servicios) y persisten riesgos. Por otro lado, la tasa de interés real ex-ante (usando el pronóstico del banco central) aumentó entre el cuarto trimestre de 2023 y el primer trimestre de 2024 pese a la baja en la tasa nominal de hoy”, expuso en su reporte diario.
Saldaña Brito destacó que el peso mexicano se mantiene apreciado. “Entonces, en ausencia de sorpresas, consideramos que lo anterior permitirá a Banxico volver a recortar la tasa objetivo en el año”.
MRA/EDD