El banco de origen español BBVA México, entidad de mayor participación en el país, redujo en 24.8 por ciento de su utilidad neta en 2020 debido principalmente al incremento de provisiones crediticias para aminorar el impacto de los impagos esperados y el otorgamiento de planes de apoyo a sus clientes para hacer frente a la pandemia de covid-19.
El resultado neto de BBVA México fue de 42 mil 860 millones de pesos, 14 mil 141 millones menos que en 2019. Los ingresos se vieron reducidos en 2.8 por ciento, mientras que las provisiones aumentaron 32 por ciento en comparación con diciembre de 2019, mismas que ya suman 47 mil 128 millones de pesos.
En conferencia para dar a conocer los resultados al cuarto trimestres de 2020, Eduardo Osuna, director general de BBVA México, aseguró que tienen una mejor perspectiva para la utilidad durante este año por la recuperación esperada de la economía que aumentará el flujo de crédito; sin embargo, aun estarán muy ligados a la trayectoria que tenga la pandemia, además de una recuperación más larga en comparación con la crisis financiera de 2009.
“Desde que nos fusionamos a partir del año 2000 no habíamos llegado a una caída de resultados de este tamaño. Incluso en la del 2009, donde el colapso de los portafolios de consumo mucho más importante de lo que hoy estamos viendo ya que fue muy corto el periodo de parón económico en ese entonces y luego vino una reactivación”.
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En este sentido, Ignacio de la Luz, director de finanzas del banco, mencionó que México fue el mercado que más impulsó los resultados del grupo a nivel global, aportando un 44.6 por ciento de su beneficio bruto, por delante de España, Turquía y Estados Unidos, filial que fue vendida durante el último trimestre del año pasado.
BBVA México aseguró que durante el segundo trimestre de 2020 el banco mantuvo una fuerte desaceleración en la originación de nuevos créditos, con la recuperación en los siguientes trimestres.
Con respecto a las carteras, BBVA indicó que el crédito a empresas mostró una baja de 4 por ciento, la de gobierno tuvo un aumento del 12, mientras que el crédito a las familias no mostró variación con el resultado de 2019.
En el desagregado, los créditos otorgados a través de tarjetas tuvieron una disminución 11 por ciento, sumando 334 mil 993 millones de pesos; el crédito al consumo mostró una baja de 23 por ciento sumando 83 mil 584 millones de pesos.
De acuerdo con los resultados la cartera de autos mostró una baja de 27 por ciento, con un monto de 21 mil 731 millones de pesos; las hipotecas bajaron 10 por ciento con un monto reportado de 44 mil 662 millones y los créditos otorgados a las pequeñas y medianas empresas (Pymes) tuvo una baja de 22 por ciento con 24 mil 845 millones reportados.
“A pesar de la caída de las utilidades, el banco sigue siendo muy rentable, con indicadores de calidad crediticia y de solvencia en máximos históricos, lo que nos permite afrontar en forma bastante buena lo que venga”, aseguro Ignacio de la Luz.
srgs