A la automotriz Stellantis, que nació en 2021 de la fusión de Fiat Chrysler Automobiles (FCA) y Grupo PSA, no le están saliendo las cosas. Las ventas de la empresa no repuntan, van con una baja de 14 por ciento a la primera mitad del año, principalmente por una menor demanda en Estados Unidos, lo que está obligando a la empresa a replantear su estrategia global.
Justo en este panorama, Carlos Tavares, quien asumió el puesto de CEO desde la fusión, ya está pensando en el retiro, por lo que la empresa ya comenzó el plan de sucesión natural.
Tavares quiere dejar todo arreglado antes de irse, pero la situación del mercado es tan compleja que no sabemos si lo logrará.
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¿Quién es?
Nació en Portugal y se graduó en la École Centrale Paris en 1981.
De acuerdo con la página oficial de Stellantis, antes de liderar la creación de la automotriz en enero de 2021, fue Presidente de la junta directiva de PSA desde marzo de 2014, después de incorporarse en enero de 2014.
Anteriormente, fue Director de Operaciones de Renault de 2011 a 2013. También se desempeñó como Vicepresidente Ejecutivo, Presidente del Comité de Dirección de las Américas y Presidente de Nissan Norteamérica desde 2009, después de unirse a Nissan en 2004. Carlos comenzó su carrera en 1981 en Renault, donde ocupó diversos cargos.
Fue presidente del Consejo de Administración de PSA desde 2014, luego de haber sido director de operaciones de Renault y vicepresidente ejecutivo en Nissan.
A lo largo de su carrera, Tavares mantuvo un enfoque en la eficiencia y la rentabilidad, lo que le valió elogios en los primeros años tras la fusión de Fiat Chrysler y PSA.
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En sus manos
Stellantis bajo el liderazgo de Tavares se centró en proporcionar movilidad limpia, segura y asequible, con una rápida transición hacia una compañía tecnológica de movilidad.
El ambicioso plan estratégico Dare Forward 2030 refleja este enfoque, con el objetivo de lograr cero emisiones netas de carbono para 2038.
Sin embargo, en los últimos meses, la situación cambió drásticamente. El mercado en América del Norte, que tradicionalmente fue una de las principales fuentes de ingresos de Stellantis, está mostrando signos de debilidad.
Las ventas de las marcas Chrysler, Jeep y Dodge cayeron significativamente, lo que generó insatisfacción en John Elkann, presidente de la compañía.
La junta directiva comenzó a explorar la sucesión de Tavares, cuyo contrato expira en 2026, según informes de Bloomberg. Esta búsqueda fue impulsada por los problemas en Norteamérica y la salida de varios ejecutivos de la región.
A pesar de ello, Stellantis mantuvo que este proceso forma parte de una planificación habitual.
SG