Este viernes 6 de agosto se conmemora el Día Internacional de la Cerveza, que se celebra desde el 2007, cada primer viernes del mes de agosto.
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Tras el tropiezo que tuvo esta industria durante el verano del 2020 cuando por primera vez paró la producción, provocando compras de pánico y escasez, hoy el sector parece florecer.
A un año, la industria cervecera va hacia una recuperación en su producción y exportación, sumando una producción de 54.6 millones de hectolitros durante el periodo enero a mayo de 2021, según datos de la Cámara Nacional de la Industria de la Cerveza y de la Malta. Esta cifra significó un 38% más en comparación al mismo periodo de 2020.
Mientras que las exportaciones, entre enero y abril de 2021 llegaron a 13.3 millones de hectolitros, un 10.7% superior al mismo lapso del año anterior.
¿Y qué pasó con el consumo?
Según indicadores de Kantar, en un año el 33% de los mayores de edad adquirieron cerveza, en promedio 7 veces, y en total compraron 21 litros.
Indicó que el canal tradicional cobró relevancia para cerveza, ya que, aunque disminuyó el consumo, fue de los canales donde la caída fue menor y en pequeña escala, también se observó este crecimiento de participación en los autoservicios, mientras que en tiendas de conveniencia disminuyó de un año a otro, y el más afectado fue on premise (canales de venta donde los productos son usados/consumidos dentro de bares, restaurantes), tanto el tradicional como moderno, ya que no hubo salidas a estos lugares.
En cuanto al tipo de cerveza, el segmento light fue el que tuvo un aumento en comparación con la regular y la oscura, explicó Adrián Ávalos, Out Of Home & Usage Food Manager de la División Worldpanel de Kantar México.
“El consumo en compañía de amigos se redujo, ésta fue la principal afectación fuera de casa, seguida de para divertirse o relajarse, mientras que tomar una cerveza por antojo se mantiene”, agregó Ávalos.
Ahora, en cuanto al consumo dentro de casa sigue muy similar al año anterior.
En cuanto a ocasiones, no se ve un traslado de fuera hacia dentro de casa, y por género tampoco se registran cambios.
Quienes sí redujeron sus momentos para disfrutar de esta bebida son los niveles bajos.