Regularización de autos 'chocolate' pone en riesgo 150 mil empleos en Coahuila

"Sé que mañana van a decir que no queremos a la gente más vulnerable, cosa más falsa", dijo el gobernador Miguel Riquelme.

Onapafa. (Rolando Riestra)
Adriana Magallanes
Coahuila /

Preocupa al gobierno de Coahuila el programa de regularización de vehículos de procedencia extranjera, que anunció en días pasado el presidente Andrés Manuel López Obrador, debido a que no se ha considerado la afectación que tendrá la industria automotriz, manifestó el gobernador, Miguel Ángel Riquelme Solís.

En Coahuila se tienen registrados casi 150 mil empleos formales del sector automotriz, es por eso, dijo, preocupa que no se estime el impacto a la industria. Expuso que no hay una consulta a los gobiernos locales y hay decisiones unilaterales que se toman sin medir el impacto de la economía real.

Consideró que se entiende a quien requiere un vehículo barato y que lo haga a través de la regularización, sin embargo, lo que no se entiende, es que el gobierno federal no tome en cuenta la generación de empleos y el esfuerzo que hacen las empresas.

“En Coahuila se calcula que existen alrededor de 110 mil vehículos de procedencia extranjera, pero no se compara con el número de empleos y con la derrama económica que genera la inversión extranjera directa y la exportación, lo que deja no a Coahuila, a México”.

¿Cuánto costará regularización en Coahuila?

Al estado pudieran ingresar 363 millones de pesos siempre y cuando, dijo, se muestren las reglas de operación, pues hasta el momento lo que se conoce es que la regularización tendrá un costo de 2 mil 500 pesos, más el cobro estatal, los derechos de control vehicular y el plaqueo.

“Lo que no entendemos es cómo se toman este tipo de decisiones, que pueden estar en sus facultades, pero que tienen que ver cuál es el impacto real de la industria automotriz, estamos muy preocupados porque Coahuila es un estado con un clúster automotriz importante y de los más relevantes a nivel nacional”.

Hasta el momento, dijo no se tiene el cálculo de las pérdidas que generarían al sector automotriz, pero sí el impacto, por lo que consideró que no era el momento, debido a que al Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá y por cuestiones laborales que están impulsando otro tipo de reacciones al interior de la industria automotriz, como lo es la falta de chips y la pandemia que provocó la desaceleración de la producción.

Miguel Ángel Riquelme Solís reiteró su preocupación por la decisión del presidente de México, pues dijo, “sé que mañana van a decir que no queremos a la gente más vulnerable, cosa más falsa, porque Coahuila los atiende y los atiende bien y además buscamos un porvenir estable para todos ellos, es decir generar empleo directo y Coahuila tiene la capacidad de generar empleos”.

aarp

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