A pesar de que la participación de Nissan en el mercado mexicano cayó de 21.6 a 17.7 por ciento de abril de 2021 al mismo mes de este año, el director general y presidente de la empresa en el país, José Román, confía en que aún pueden retener el primer lugar en ventas.
“Hoy no creo que es adecuado medir el performance con lo que pasa de un mes a otro, porque está muy inestable el sistema de abastecimiento de piezas, entonces la realidad es que no es un buen momento para medir… El sistema de abastecimiento está muy inestable. Nos ha tocado parar fábricas en algún momento, pero les ha pasado a todas las marcas, por eso es muy difícil medir el desempeño en este momento”, dijo en entrevista con MILENIO.
Cabe resaltar que las firmas como General Motors, Toyota y KIA lograron incrementar su participación de mercado en el mismo lapso; incluso la japonesa Toyota está casi por igualar el porcentaje de otra marca emblemática en México, Grupo Volkswagen.
México para Nissan es un mercado muy relevante, pues es el único país en el mundo donde son los líderes del mercado, su estrategia de comercialización en suelo azteca es relevante para su operación global.
“En la industria automotriz como empresa japonesa pensamos en el largo plazo. Entonces no puedes hacer un negocio solo pensando en las ventas de este mes o del trimestre. Son inversiones de proyectos muy grandes y proyectos muy pesados, entonces nuestra visión es de largo plazo. Nissan México confía como centro de inversión y conocimiento”, dijo José Román.
La automotriz anunció a principios de mayo una inversión por 700 millones de dólares para mejorar sus procesos de producción en sus dos plantas de Aguascalientes, así como para la capacitación de personal, lo que muestra su visión de negocio a largo plazo desde la perspectiva de Román.
Agregó que si bien, la falta de inventario impacta los resultados en ventas, el valor de la industria ha ido al alza.
De acuerdo con datos de la consultora J.D. Power, en 2019 el valor de la industria automotriz en 2019 era de 409 mil 200 millones de pesos, cifra que este año se ubica en 422 mil 142 millones de pesos.
“Estamos viviendo un momento interesante, porque para la industria automotriz, el tamaño del mercado ha bajado relativamente, pero la demanda sigue igual; nosotros tenemos más clientes, pero lo que sucede es que no tenemos suficientes coches. Lo importante siempre es tener una oferta justa para el cliente, que sea lo que el cliente quiere con las especificaciones correctas y al precio correcto, y eso siempre tratamos de mantenerlo, por eso tenemos el resultado de ventas que tenemos”, expresó.
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Logística, el reto
Desde la perspectiva del presidente y director general de Nissan en México, el desafío principal al que se enfrenta actualmente el sector está en la logística, al momento de la integración de todos los factores en la cadena de valor.
“El desafío que estamos enfrentando como industria automotriz es más de logística. El desafío que estamos enfrentando como industria automotriz es más de logística. Tengo una línea de clientes que debo de cumplir la entrega de sus vehículos, entonces mi desafío principal en este momento es satisfacer la confianza que nos han dado esos clientes y entregarles sus vehículos lo más pronto posible, pero hay un entorno de logística que no está funcionando a nivel global, entonces no es un escenario normal el que estamos viviendo”, aseveró.
En entrevista con MILENIO, el presidente de Nissan Américas, Jérémi Papin, señaló que la disrupción en las cadenas de suministro no solo se observa en la falta de semiconductores, causada una mayor demanda por parte del sector de aparatos electrónicos.
“En estos momentos tenemos retos muy grandes, como el cierre por covid en algunos países y las dificultades por la situación en Europa, entonces esto va mucho más allá de los semiconductores, hay partes que también tardan que lleguen”, añadió.
Ante este escenario, Papin resaltó que la firma ha orientado esfuerzos a trabajar de forma más cercana con la tecnología, buscando el talento para apuntalar su negocio. En ello, resaltó que se han buscado formas de aminorar riesgos, como el robustecimiento de las cadenas de valor en las Américas y en México.