En medio de una situación ya de por sí complicada para Venezuela, ahora el gobierno federal está teniendo presiones de índole económico para hacer frente al coronavirus, por lo que el presidente de ese país, Nicolás Maduro, solicitó al Fondo Monetario Internacional (FMI) un financiamiento de 5 mil millones de dólares para fortalecer su sistema de salud y contener la expansión de la pandemia.
A través de su cuenta de Twitter, el canciller, Jorge Arreaza, divulgó una carta fechada el 15 de marzo donde Maduro pide al FMI la posibilidad de otorgarle a Venezuela "una facilidad de financiamiento de 5 mil millones de dólares del fondo de emergencia del Instrumento de Financiamiento Rápido" para fortalecer los "sistemas de detección y respuesta", luego de la confirmación de nuevos infectados por el coronavirus.
El financiamiento se plantea en momentos en que Venezuela enfrenta una crisis de ingresos por la caída global de los precios del petróleo y limita su capacidad para pagar un préstamo a cinco años. Maduro declaró en la semana que la cotización del crudo estaba por debajo de los costos producción.
El FMI dijo en un comunicado que "no estaba en condiciones de considerar la solicitud", tras señalar que no había "claridad en el reconocimiento" del gobierno de Maduro entre sus países miembros. Más de 60 naciones califican al líder socialista de "dictador" y de usurpar la presidencia después de una cuestionada reelección en 2018.
La última vez que Venezuela solicitó dinero al organismo multilateral fue a fines de la década de los 90 y desde que asumió el poder Hugo Chávez, en 1999, los créditos para diversos sectores fueron gestionados ante otros entes como el Banco Interamericano de Desarrollo y CAF.
En 2017, Venezuela planteó retirar al país del FMI por considerar que servía a los intereses de Estados Unidos, pero la salida no ocurrió por trabas burocráticas.
Hace cinco años la nación OPEP retiró dinero del Fondo para elevar las reservas internacionales por un descenso en los precios del petróleo. Y cada año debe informar al ente las cifras sobre el desempeño de la economía, datos que se entregan con retrasos.
En enero del pasado año, el FMI suspendió la actividad con Venezuela por la crisis política.
Cualquier financiamiento ante el organismo requiere el aval de la Asamblea Nacional, que es controlada por la oposición.
En la carta divulgada por Arreaza se señala que "tomarán medidas rápidas y enérgicas" contra el virus. Pero médicos y gremios de la salud han alertado que los hospitales no están en condiciones de atender pacientes por fallas de servicios, equipos y medicinas.
MCM