Estados Unidos generó 8 millones de empleos nuevos en julio, una cifra menor a la de los meses previos de mayo y junio, ante los nuevos casos de coronavirus SARS-CoV-2, que causa la enfermedad covid-19 en el mundo, lo que demuestra que la recuperación económica del país aún está lejana.
Economistas consultados por Reuters habían previsto una adición de 1.6 millones de empleos en julio. Por lo que la tasa de desempleo se redujo a 10.2 por ciento desde 11.1 por ciento de junio.
Sin embargo, el Departamento de Trabajo dijo que algunos trabajadores continúan siendo mal clasificados en la encuesta, y que la tasa de desempleo habría sido un punto más alto de lo reportado.
El alza de empleos en julio mostró una fuerte desaceleración desde el aumento de 4.8 millones en junio y 2.7 millones en mayo, y significa que se han recuperado menos de la mitad de los 22 millones de empleos de nómina perdidos durante la pandemia declarada a mediados de marzo.
Las mayores ganancias se registraron en los sectores del ocio y la hospitalidad y el comercio minorista, los más afectados por los cierres por el coronavirus, según el reporte. También hubo importantes creaciones de empleo en el gobierno y la atención de la salud.
El número de personas en despido temporal disminuyó en 1.3 millones, pero casi tres millones de trabajadores perdieron sus empleos permanentemente, según los datos.
Mientras tanto, 8.4 millones de personas en julio trabajaban a tiempo parcial no por elección sino por necesidad, un grupo conocido como trabajadores involuntarios a tiempo parcial.
La tasa de desempleo para los trabajadores negros, del 14.6 por ciento, sigue siendo mucho más alta que la tasa nacional y muy superior a la de los trabajadores blancos, del 9.2 por ciento.
Entre los hispanos, la tasa de desempleo de julio es del 12.9 por ciento, en baja respecto al 14.5 por ciento de junio pero también por encima de la tasa nacional.
Con información de AFP
MRA